El CD Torrijos se apoderó del derbi provincial y afrontará la fase de ‘playoff’ como tercer clasificado. Será la tercera ocasión que el cuadro rojiblanco juegue por subir a Segunda B. Y lo hará muy seguro de sí mismo, con su forma de ser y después de otra victoria fraguada en la intesidad y la rectitud. Como en estos casos, hubo nervios, muchos, y también que tirar de los móviles para estar pendientes de lo que sucedía en Marchamalo. Por su parte, el CD Villacañas, que fue de menos a más, se tiene que conformar con una quinta plaza que también es gloria, aunque el equipo de casa quería cumplir con su afición.
Ya desde el inicio, el cuadro de Fran Sánchez se metió en tres cuartos de cancha a presionar la salida de balón del rival, y la verdad es que fue una idea magnífica porque se puso en problemas a un Villacañas de azul contra el cáncer. Hubo un par de llegadas por cada banda, pero la primera clara, en el minuto 13, fue para adentro. Mario Serrano vio desmarcarse a Nacho y le metió un balón al que Rodri llegó antes por centésimas de segundo. Sin embargo, el rebote le cayó a Diego Prado, que definió sin oposición con la pierna izquierda.
El gol le sentó al CD Torrijos como una siesta después de trabajar diez horas. De hecho, a pesar de varios robos peligrosos que pudieron elevar la cuenta, los villacañas se empecinaron en salir desde atrás con la pelota jugada una y otra vez.
El CD Torrijos gana el derbi y acaba tercero (1-2)En el minuto 20, Gonchi pudo haber empatado en una jugada a balón parado a la que respondió Machuca. Por lo demás, con Ángel bien tapado, la conexión Mario Serrano-Diego Prado fue bastante fructífera para encontrar huecos entre los centrales y Mode, aunque luego el resultado tampoco llegó a buen puerto. Los de Fernando Lominchar, por su parte, bastante tuvieron con relevar a Loren Molinero, que no se encontró bien desde los primeros minutos.
Al descanso, el equipo visitante también tuvo que cambiar a Diego Prado, por un golpe, y en su lugar salió Borja Escoredo. Pero la tendencia ya se vio claramente distinta a la de la primera parte. Los de casa dispusieron de más balón y de más llegadas. Poco a poco, fueron metiendo al Torrijos en su área y, en el minuto 54, asustaron con un larguero de Raúl Godoy después de una internada de Mode por la derecha.
Lominchar metió más gasolina, con Carballo y Álex González, para aumentar la potencia del motor. Con llegadas constantes, fue incrementando la tensión en el Torrijos, ya sabedor del tropiezo claro del Guadalajara. Ese paso adelante se materializó en aproximaciones, pero las ocasiones de gol tuvieron que gestarse con acciones de estrategia. En los últimos diez minutos, el derbi provincial se rompió y en esas idas y venidas, el Villacañas tuvo un par de opciones, pero acabó encajando el segundo al contragolpe, ya en el descuento. Mario Serrano disparó ante Rodri y el guardameta la rechazó a los pies de Ángel, que no perdonó. Pero el descuento interminable tenía guardada incertidumbre con el tanto de Ibou, al remachar una falta botada por Carballo desde el lado izquierdo. Al final, el pitido del colegiado desató la locura en el CD Torrijos y dejó de bajón al CD Villacañas, pero ambos tienen opciones aún de militar en otra categoría.