Un centenar de empresarios de la fabricación y la venta de productos para el turismo se concentraron ayer en Zocodover para solicitar que los gobiernos nacional y regional les incluyan entre quienes van a recibir ayudas directas porque de eso depende que pueda sobrevivir un sector que da empleo a más de 50.000 personas en toda España. El problema llega al extremo de que «dos de cada cuatro negocios pueden cerrar si no se toman medidas ya; va a ser una catástrofe para Toledo» (donde sus 150 comercios sostienen 550 empleos y otros 2.200 indirectos) y para la región (donde solo los fabricantes dan 2.700 empleos directos y 3.200 indirectos).
Pasan por un momento clave ya que el Gobierno nacional aprobó un decreto que les excluye pero que se tiene que convalidar pasado mañana y esperan que las autoridades recapaciten, rectifiquen y que incluyan a los dos sectores en el reparto de las ayudas directas.
Pedro Espinosa, presidente de la Asociación de Comercio de Artesanía, Productos Turísticos y Souvenirs de la provincia de Toledo dice que se sienten los grandes olvidados porque no tienen ayudas de ningún tipo. Quieren que les den visibilidad, que se sepa que existen estas miles de familias que comparten el mismo problema y que con las calles están vacías de turismo desde el 14 de marzo de hace un año han visto en 2020 caer su facturación un 92% y este año un 100%. Solo piden estar dentro de las ayudas que se reparten a los afectados.
Comercio y fábricas de souvenir exigen la ayuda directa - Foto: Yolanda LanchaJosé Carlos Sánchez, representante de los fabricantes, representantes y suministradores en general de artículos turísticos subraya que la burocracia nacional y regional hacen que no puedan acceder a ninguna ayuda y que ya han explicado a las autoridades que no figuran dentro de un CNAE específico para su actividad y les responde que entienden el problema pero no toman decisiones para solucionar. La consecuencia es que las fábricas están cerradas, los empleados en ERTE y los negocios corren serio peligro de perderse.
Manuel Madruga, secretario general de Fedeto, advierte de que la situación es «agónica, dramática e injusta»para quienes forman parte de la cadena de valor del turismo pero no les tiene en cuenta en las ayudas porque se aplica el sistema CNAE que es arcaico y no objetivo ya que no tiene en cuenta todas las actividades económicas.
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