El entrenador del Soliss Talavera, Juanma Marrube, a tenor de la victoria por 3-2 de su equipo ante Peñíscola, quiso en primer lugar felicitar a sus jugadores dado que “fueron una vez más muy sólidos en el plan de partido, muy sacrificados y honestos en todo”.

En cuanto al encuentro en sí, explicó que “desde el segundo cero sabíamos qué tipo de partido y de rival nos íbamos a encontrar y si flojeábamos en algún sentido, nos iban a hacer daño”. Valoró en este sentido que “creo que salió muy fortalecido el planteamiento inicial y encima los goles te lo corroboran”. Pero reconoció también que “sufrimos en muchas situaciones, pero no fueron demasiado claras”; porque, como consideró, “el equipo se fue asentando después en otras fases e, incluso, cuando encajamos el 3-1, gestionamos bien esos dos minutos que quedaban para el final del primera parte”.

Respecto al segundo tiempo declaró que “la primera rotación fue buena e, incluso, pudimos marcar el cuarto gol, pero después ellos nos hicieron también mucho daño durante 10 ó 12 minutos”. Por encima de todo, quiso destacar que esta victoria “es la recompensa al trabajo”.

El conjunto talaverano desplegó durante todo el encuentro un gran derroche físico; sobre este apartado, Marrube puso de relieve que “en ese sentido fuimos muy sólidos en la recuperación y correr, así como en la recuperación y atacar”. Es más, “creo que nos ha dado goles y ocasiones”; estaba previsto puesto que “era el plan de partido, sobre todo, contra un equipo con tanto potencial y que te somete tanto en situaciones de uno contra uno”.

A pesar de que el choque salió a la perfección en las filas talaveranas, Marrube avisa que “tampoco nos tenemos que confundir porque en una situación puntual, una expulsión (Anass) te juegas en 17 segundos el empate después de trabajar todo el partido”. De todos modos quiso elogiar que “fuimos buenos y efectivos en esa opción de ser sólidos defensivamente y atacar desde la recuperación”.

La igualdad preside esta Segunda División o, como dice Marrube, “ganar o perder está muy en el hilo de la navaja”. Por ello, la solidez y el carácter del equipo no son negociables para, al mismo tiempo, “crecer en otras fases del juego”.

De este modo, el Soliss Talavera lleva pleno de victorias en las dos jornada de Liga que ha disputado y, además, tiene pendiente el primer partido del Campeonato ante UMA Antequera. Los encuentros hasta ahora celebrados sirve para “medirnos como un termómetro”. Y otra lectura que hace el técnico es que los favoritos, a los que su escuadra se deberá enfrentar en estos comienzos, “es mejor cogerlos ahora que cuando vayan dieciséis jornadas”. En su opinión, “eso nos da una pequeña ventaja”, a pesar de que “somos un equipo en transformación que llevamos sesenta días trabajando”, en contraste con, por ejemplo, Peñíscola donde “hay muchos jugadores que llevan dos años jugando juntos”.