Agónica victoria del Madridejos ante un Pedroñeras que mereció más. El conjunto visitante dominó y gozó de ocasiones de gol en el primer tiempo pero pagó caro su poco acierto a portería con una derrota mínima a manos de un Madridejos que no mereció tanto premio. El meta local Gorka fue uno de los artífices de la victoria local con paradas de mérito en la primera mitad del encuentro.
En los primeros compases del choque, el cuadro visitante generó mucho peligro al contraataque y a los pocos minutos del pitido inicial ya tuvo una gran oportunidad para romper el empate a cero. Un gran pase de Minos a Juanbe y el posterior disparo de éste obligo a intervenir con una gran parada al meta local Gorka.
Era el primer aviso de los visitantes, que minutos después pondrían en más apuros a un Madridejos que no encontraba su lugar sobre el césped de su feudo y apenas hizo nada destacable.
El Pedroñeras, por su parte, se encontraba a gusto dominando el encuentro ya que los madridejenses no pasaban del centro del campo. Juancar tuvo otra clara que la defensa local esta vez sí estuvo atenta de despejar aunque no sin intriga. Poco después, Santi Cabeza lanzó una falta y Rubén no llegó a rematar.
El portero local Gorka se erigía como uno de los mejores de su equipo. Fue él quien despejó con una mano salvadora un disparo de Karamba que bien podría haber sido el 0-1. En el minuto 38 se produjo otra jugada curiosa: el portero visitante Txata realizó un disparo fuerte y largo y casi sorprendió a su homólogo. A partir de entonces fue un recurso que el meta utilizó en alguna otra ocasión. Al filo del descanso, Alex Gómez tuvo otra. Aún así el marcador ya no se movió más.
Tras el descanso, ya se pudo percibir que el Madridejos salió a por todas y dispuesto a mejorar la imagen. Y, como estaba más fresco, sorprendió, y de qué manera. En el minuto 78, Egie remató de cabeza un gran pase de Mamadou y batió a Txata, que no pudo hacer nada para evitar el gol. De esta forma, los de Paco Senda sacaron petróleo de la pólvora mojada de su rival.