«A las mujeres se nos tiene muchísimo más en cuenta»

Jonatan López
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María Ángeles es doctora en Farmacia, nutricionista y dietista y desde hace varios años se ha convertido en una de las influencers más famosas del país, gracias a su particular método de divulgar medicina y ciencia

María Ángeles García. - Foto: Ví­ctor Ballesteros

¿Qué queda de aquella joven farmacéutica que dispensaba medicamentos en Villaescusa de Haro y Belmonte?

Pues queda todo, porque realmente lo que hago es muy parecido. El mismo consejo farmacéutico que daba en el mostrador de la farmacia de Belmonte o de Villaescusa de Haro, ahora lo doy en otro mostrador mucho más grande que es la cuenta de instagram. Lo único que, claro, en vez de ser 500 habitantes como en Villaescusa, ahora son 400 y pico mil, pero la esencia es la misma.

¿Pensaba cuándo publicó El paciente impaciente que dejaría de estar detrás del mostrador para pasar a estar frente a la cámara?

Nunca, jamás. De hecho, mi amiga Pilar me dijo: te quedan dos telediarios en la botica. Yo le dije: eso nunca. He echado los dientes en una farmacia y moriré con la bata puesta. La vida te lleva por otros caminos y no descarto volver, pero en esta etapa estoy siendo muy feliz.

Imagino que a veces se siente la farmacéutica de España y la gente le confía sus secretos más inconfesables. ¿Cuantas preguntas le mandan cada día a su blog?

A diario son cientos y, dependiendo de si hay un tema, pueden ser miles. Es imposible que conteste a todas, lo intento en su mayoría. Lo que hago es que las leo y cuando hay un tema que requiere mucho interés, intento hacer un vídeo o directo en instagram o algunos stories para aclararlo de manera genérica.

¿Por qué cree que estamos más predispuestos a escuchar consejos médicos o de nutrición si se hacen de forma natural y con un toque de humor?

Porque realmente lo que queremos es enterarnos de las cosas. Los sanitarios nos hacen sentir poco inteligentes, porque no nos enteramos, y uno piensa que no entiende cuando en realidad es que no está utilizando el código. Nos hace sentir bien entender lo que necesitamos oír. Respecto al sentido del humor, queremos entretenernos hoy más que nunca. No queremos tostones, para eso ya tenemos el telediario varias veces al día, contándonos cosas que no queremos escuchar.

La he visto en varios vídeos desmontando a negacionistas que aún piensan que la pandemia es una invención. ¿Qué cree que lleva a estas personas a rechazar lo evidente? ¿Se llega a morder la lengua?

Hay una parte de desinformación clara y luego hay otra parte que yo creo que es de desesperación. Creo que la pandemia nos afecta a todos, y el problema es que todos somos iguales pero no todos tenemos la misma repercusión cuando abrimos la boca. La panadera, en su panadería, puede hacer una reflexión y no va a ninguna parte, o uno en un café, con sus amigos, pero si abres la boca delante de las cámaras pues esto llega a millones de personas y tenemos un problema. ¿Lo de morderme la lengua? No creo en la crítica gratuita ni en hacer leña, eso no vale absolutamente para nada. Creo en construir, pero si que pienso que cuando se hacen esas declaraciones y sobre todo se vierten mentiras, hay que contrastarlas. Si alguien dice, como Victoria Abril, que ha muerto más gente desde que hay vacunas y eso es mentira, habrá que dar los datos y decir que esta mujer está diciendo algo que no es cierto.

Esto se lo han preguntado más de una vez. ¿Se acabará la pandemia pronto y ya no tendremos que lamentar más muertes algún día?

En el corto plazo no. Lo que sí que tenemos es una tendencia bastante mejor que la que teníamos el mes pasado. El problema es que llega la Semana Santa, que vivimos en espacios de vacaciones cada tres meses y, en este caso, nos da la oportunidad de mejorar lo que hicimos en Navidad. Lamentablemente, nuestra experiencia con las vacaciones nos lleva a pensar que tendremos una cuarta ola. Ojalá no sea así y lleguemos al 70 por ciento de vacunación. Afortunadamente, la ciencia nos ha dado vacunas que es el mejor regalo que podemos tener. ¡Ojo, que nos queda mucho tiempo de prevención!

Lo de las mascarillas fue una excelente idea. ¿Cómo se le ocurrió y que recaudación solidaria ha tenido?

Se me ocurrió en cuanto hubo una normativa para hacer mascarillas seguras y me dediqué a involucrar a manchegas. Al final, lo bonito del asunto es que de los más de 150.000 euros que llevamos donados, que se dice pronto, lo que hemos conseguido con algo que nadie quiere llevar, que todo el mundo está deseando quemar en una hoguera como las mascarillas, yo la primera, es sacar algo positivo. Primero, unos diseños que sean reconocibles, entre ellos el del Castillo de Belmonte. Y la gente, cuando se reconoce por la calle con ellas, se saluda.

¿A qué le sabe el reconocimiento  como mujer ‘Imprescindible’?

Me sabe a dos cosas.  Por un lado, es un vértigo enorme, porque pienso que hay muchísimas mujeres de la región y el reconocimiento me parece que me queda grande y que mi historia no es nada en comparación con lo que se trabaja en el medio rural. Por otro, es un orgullo tremendo. A mi, en mi tierra, siempre me tratan fenomenal y la prueba es el interés que siempre tenéis los medios de aquí. También es agradecer e intentar devolver un poco de todo lo que le debo yo a esta tierra donde he crecido. Si podemos dar visibilidad y conseguir que nuestra tierra y nuestras mujeres se reconozcan más, es lo mínimo que puedo hacer.

Sea sincera, ahora que no nos lee nadie. ¿Llegará el día en que la brecha se acabe y no exista desigualdad entre la mujer y el hombre?

Creo que a las mujeres se nos tiene muchísimo más en cuenta, por ejemplo en los actos y eventos científicos de comunicación. Ya no por imposición, si no de manera orgánica por que hay mucha visibilidad. Lo que tenemos que hacer es luchar para educar a nuestros hijos, y digo hijos, chicos con ‘o’. Enfocamos estos días en las mujeres, pero si a los chicos no se les educa en lo mismo, esas mujeres se frustrarán cuando se les haya educado en algo que los compañeros que tengan al lado no lo ven claro. La respuesta es un poco parecida a la que me preguntabas antes sobre si se acabará el coronavirus. Tanto la pandemia como la brecha y las diferencias de género nos van a acompañar durante un tiempo pero, en los dos casos, depende de nosotros y no podemos escudarnos solo en lo que hagan los gobiernos. Cada uno, por sí mismo, individualmente, puede hacer cosas en su día a día para frenar la pandemia y parar la brecha. Tarea tenemos.