Muere Luis Alba, custodio y retina de Toledo

A. de Mingo / Toledo
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La Real Academia toledana, el Archivo Municipal, los guías turísticos y el mundo de la cultura lloran al gran coleccionista de la ciudad. Afortunadamente, queda su legado

Fallece Luis Alba, guía de turismo y coleccionista

Luis Alba González, investigador, guía turístico y sin duda alguna el mayor bibliófilo y coleccionista de objetos y documentos de temática toledana, falleció durante la madrugada de ayer a los 86 años de edad. Desaparece con él una fuente fundamental para conocer el imaginario de esta ciudad y la configuración de su identidad a lo largo de los últimos siglos, inmenso legado que ahora se reparte entre el Archivo Municipal -donde permanece el grueso de su colección- y un pequeño grupo de amigos y discípulos como Rafael del Cerro Malagón o Eduardo Sánchez Butragueño, quien ayer lamentaba profundamente su muerte. Instituciones como la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas -en la cual ingresó como correspondiente en 1981- o el sector de los guías lloran su muerte, que deja aún más huérfano el panorama cultural toledano.

Luis Alba González nació en esta ciudad el 11 de enero de 1934, en el seno de una familia con fuerte arraigo toledano -era nieto del doctor Emilio González Orúe, a quien recordó hace algunos años en una conferencia- que en 1936 habría de enfrentarse a una doble circunstancia: el fusilamiento de su padre y su exaltación simbólica por parte de la iconografía franquista. «Mi familia no me transmitió una ideología jamás, porque dudo que mi propio padre la tuviera -comentaba a La Tribuna en 2006, cuando este periódico publicó una amplia serie de contenidos sobre la Guerra Civil con la cual colaboró con absoluta generosidad-. Él era militar por vocación, totalmente ajeno al ideario de un partido. Y no creo que muchos de quienes estaban dentro del Alcázar fueran contra la República como institución, ni pretendieran reinstaurar la monarquía».

Tras iniciar sus estudios en Toledo y Madrid, el joven Luis pronto manifestó un gran interés por los idiomas, obteniendo el certificado de Lengua Francesa por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central. Posteriormente continuó sus estudios en el Reino Unido, en la Universidad de Londres. Tras ser habilitado como correo turístico por el Ministerio de Información y Turismo en 1960, inició a partir de entonces una larga etapa de viajes por Europa y el norte de África. Más adelante se convertiría en funcionario de carrera del Cuerpo de Informadores Intérpretes de Turismo, con destino en Badajoz y Cádiz hasta su llegada a Toledo, en 1982. Al frente de la Oficina de Turismo se mantendría durante dos décadas, hasta su jubilación en 2002.

Fallece Luis Alba, guía de turismo y coleccionistaFallece Luis Alba, guía de turismo y coleccionistaSiempre reconocía la paradoja de que quien conoció tan bien esta ciudad permaneció dos décadas alejado de ella, aunque configurando poco a poco la que habría de convertirse en la gran colección particular sobre la misma (contribuyendo a suplir, en buena medida, la inexistencia de un museo de la ciudad). Un fondo, recuerdan desde la Real Academia toledana, que Luis «siempre ofreció a cuantos investigadores se lo solicitaban». Correspondiente de la misma en 1981, ingresó como miembro numerario en 1989 (Medalla IV), con un discurso titulado «La Sociedad Económica de Amigos del País a través de sus actas (1776-1816)». Desempeñó el cargo de secretario entre 1995 y 2005.

Consejero de Instituto Provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos (IPIET) en 1983, Luis Alba fue reconocido por su gran labor por una larga serie de instituciones, comenzando por el Ayuntamiento, quien -pese a la sombra de estos últimos años sobre el pago por su colección- le nombró Hijo predilecto de la ciudad en el año 2009. También fue Premio de la Real Fundación de Toledo, Placa al Mérito Turístico de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y Premio de la Cámara de Turismo e Industria, entre otros. La Asociación de Libreros Anticuarios de Madrid (Libris), por ejemplo, le otorgó su título de Bibliófilo Predilecto.