Este martes sin mercadillo, los toledanos con mono de compras tienen la opción de Santa Teresa. La Asociación de Comerciantes y Hostelería del barrio ha puesto en marcha la campaña ‘Los martes de Santa Teresa’, con el objetivo de atraer hacia allí a los visitantes que los martes aprovechan para hacer sus compras en el tradicional mercadillo de Toledo capital.
En realidad, la idea no surgió como alternativa al ‘martes’, explica el presidente de los comerciantes de Santa Teresa, Carlos Molina Sagospe, sino como un intento de atraer a unos bares y comercios golpeados por la crisis que conlleva la pandemia a los visitantes de la ciudad con motivo del mercadillo, «todos sabemos que los martes viene muchísima gente de fuera y a mediodía se van a sus casas. Intentábamos dar un argumento más para que quien venga de fuera llegue a Santa Teresa con promociones especiales y menús especiales, que pudieran seguir haciendo sus compras aquí».
Con esta iniciativa más de un centenar de establecimientos de hostelería, tiendas de ropa, alimentación, servicios, ferreterías, lencería, floristerías, jugueterías o deporte harán sus particulares ofertas. Según explica Molina Sagospe «los visitantes podrán identificar el establecimiento adherido y asociado a esta novedosa campaña porque en su escaparate mostrará un póster sobre ‘Los martes de Santa Teresa’, y cada uno de ellos hará a sus clientes durante los martes descuentos en el gasto final del tickets, regalos, puntos de fidelización, ofertas dos por uno, o diferentes promociones según los días y productos». En definitiva, los visitantes podrán encontrar en cada establecimiento adherido algún producto en promoción, descuentos o regalos.
Dinamizar el comercio. El objetivo es continuar impulsando el barrio de Santa Teresa, dada la difícil situación que se atraviesa por la crisis Covid-19, con ideas creativas e ingeniosas, donde «más allá de los presupuestos que hacen falta para dinamizar desde las administraciones públicas el comercio local, la ganas de querer seguir adelante y ofrecer lo mejor a nuestros clientes es lo que nos va a permitir no cerrar nuestros negocios y seguir avanzando, con muchas dificultades, pero entre todos lo conseguiremos», señala Molina Sagospe.
No en vano, apunta el presidente de sus comerciantes, estos negocios no solo viven de los vecinos de Santa Teresa, sino en general de los vecinos de toda la ciudad y municipios de los alrededores. Hay más de doscientos comercios activos que necesitan clientes. De ahí que, dando vueltas a la cabeza para dinamizar el comercio, surgió esta idea de los martes, porque viene mucha gente de fuera.
Tras el confinamiento, Molina Sagospe reconoce que al menos en Santa Teresa los comercios siguen abiertos, «pero tenemos que promocionar el barrio de alguna manera para seguir manteniendo algo de actividad, que es lo que necesitamos».
Del mismo modo el presidente apostilla que «seguimos manteniendo las medidas higiénicas y sanitarias y los aforos en función al último comunicado del Ayuntamiento el pasado jueves, para mayor seguridad y confianza de nuestros clientes».
Desde hace años, los comerciantes de Santa Teresa están buscando de constituirse en algo parecido a un centro comercial abierto, si no tal, porque se necesitan unos estatutos especiales y horarios idénticos, al menos comenzar a coordinarse, con actividades como esta, en la «que vea todo el mundo que tienen su razón de ser y que surten efecto, que atraen a gente si estamos unidos».