La candidata del PP a la alcaldía de Toledo, Claudia Alonso, visitó el barrio del Polígono coincidiendo con la tradicional celebración del mercadillo de los sábados por la mañana. La popular departió con decenas de vecinos y repartió publicidad preelectoral. Alonso recordó la condición de toledanos de todos los habitantes de la ciudad, sin que importe el barrio en el que residan, y apuntó a la necesidad de apostar por todos los distritos que conforman la capital regional. «Nuestro mensaje es de cercanía, creemos que un Ayuntamiento tiene que estar a pie de obra, a pie de calle», aseguró Alonso.

«Decimos a todos los vecinos que no puede haber toledanos de primera y toledanos de segunda», explicó Alonso. La candidata recordó que el Polígono es el barrio más poblado de la ciudad y apuntó a la cohesión de la urbe como reto pendiente. «Necesita sentirse más cerca y más unido al resto de barrios de la ciudad», dijo Alonso sobre un enclave al que separan varios kilómetros tanto del centro histórico como de otras áreas de población dentro del término municipal.

Alonso incidió en la problemática surgida en el barrio por la presencia de restos contaminados con amianto en varios parcelas. La popular lo tildó de «tema fundamental» y apuntó a que las «últimas informaciones conocidas indican que puede haber mucho más amianto  de lo que se creía en un principio». Además de reclamar «riesgo cero para la salud» de todos los toledanos, la popular pidió «la suficiente seriedad y rigor» para abordar una causa que marca la realidad cotidiana en Santa María de Benquerencia.

Durante su paseo por las calles del barrio, Alonso censuró que el Ayuntamiento permaneza «ajeno al ciudado de los servicios diarios aunque los vecinos pagamos muchos impuestos». La candidata señaló la necesidad de revitalizar el barrio, aludiendo explícitamente «a los parques sin arreglar y zonas sin ajardinar ni limpiar» que han de denunciar los propios vecinos.

Además, Alonso citó la obra del paseo Federico García Lorca como ejemplo del mal hacer del Gobierno municipal. «Hubo que gastarse el dinero en volver a arreglarlo porque el Ayuntamiento lo hizo mal».