El recuerdo de los intelectuales que abandonaron España en 1939 protagonizó la primera sesión del Congreso Plural ‘Ochenta años después. Ecos del exilio republicano en el franquismo y la transición’ organizado por la Asociación Manuel Azaña (AMA) y el Centro Asociado de la UNED en Talavera. En ella participó Manuel Aznar, que centró su intervención en el relato pormenorizado de lo que supuso el año 1939 para los exiliados que cruzaron a centenares de miles la frontera francesa. Aznar se refirió a la salida que encontraron los intelectuales que, gracias al apoyo extranjero, pudieron embarcar rumbo a Méjico o Chile donde pudieron dejar huella de su alta preparación profesional.

Por su parte, el periodista Eusebio Cedena dio un repaso a autores y autoras que elaboraron en el exilio casi toda su obra, centrándose especialmente en el género del diario personal y en autores como Juan Ramón Jiménez, Cenobia Camprubí o Max Aub.

Por su parte, Jesús Fuentes hizo una pormenorizada historia de la importancia del ingeniero Manuel Díaz Marta en la transición española y en su oposición histórica al Trasvase Tajo-Segura al que combatió desde su puesto de diputado y senador socialista.

Cerró el ciclo Julio Fernández-Sanguino quien utilizó el Quijote como referencia para comparar la vida novelesca del personaje cervantino con los pesares del exilio republicano. Hizo especial mención a los exiliados del interior, refiriéndose a personas talaveranas como Rafael Morales o Eladio Martínez Montoya.