El arzobispo emérito de Toledo, Braulio Rodríguez, ha sido dado de alta tras las pruebas a las que ha sometido en el hospital de las Tres Culturas donde fue trasladado al sentirse indispuesto tras finalizar la ceremonia en la Catedral en la que ha tomado posesión Francisco Cerro. Don Braulio fue el encargado de entregarle el báculo que él convierte en el arzobispo 121 de la archidiócesis.
El arzobispado ha informado que don Braulio ha sido sometido a una pruebas diagnósticas y Tras conocerse los rssultsdos los médicos han decidido no ingresarle. Al parecer don Braulio padece una fuerte anemia.
El arzobispo fue operado el año pasado del estómago, operación de la que sigue convaleciente y que le ha provocado un deterioro físico que se ha agudizado en las últimas semanas.