Ciudadanos acudió al Pleno de ayer con una moción que pretendía incrementar el confort térmico y la calidad del aire, así como los espacios públicos del Casco Histórico, mediante un Programa de Infraestructura Verde.

Ni sus propuestas de replantar los árboles dañados por la borrasca Filomena, ni la posibilidad del reverdecimiento de azoteas y fachadas con trepadoras y jardines verticales en edificios rehabilitados, o nuevos, terminaron por convencer al equipo de Gobierno del PSOE, que terminó echando para atrás la moción con el voto del concejal no adscrito, Luis Miguel Núñez, ex de Vox.

Antes de eso, el portavoz de Cs, Esteban Paños, había logrado ir convenciendo al resto de fuerzas políticas de la ciudad con mayor o menor ilusión.

IU criticó el modelo urbanístico que diseña barrios sin árboles en sus calles (La Legua, por ejemplo), y el PP se refirió a la poca ambición de la propuesta de Cs, que en su opinión podía ser extensible al resto de la ciudad. Mientras que la concejal de Vox afirmó que no veía eso de las azoteas verdes en el Casco. Pero finalmente esos tres partidos políticos le dieron a Paños el voto favorable para una moción «sencilla, clara y con mucha visión de futuro» que no pudo salir adelante ya que el PSOE dijo que «estaba poco trabajada» y que hacía referencia a actuaciones que ya se realizan o están en su «hoja de ruta.