La Federación Empresarial Toledana (Fedeto) comprende que el Ayuntamiento no tiene competencias directas para ayudar al sector del Turismo y que aún así ha articulado partidas para hacerlo con las empresas de la ciudad. A partir de ahí, explica el secretario general de la organización, Manuel Madruga, los empresarios han pedido a Milagros Tolón que, como vicepresidenta de la Femp y alcaldesa de la ciudad más importante de las Patrimonio, interceda ante los gobiernos regional y estatal para que se complementen estas ayudas. Así lo apunta tras el encuentro que los fabricantes de artículos turísticos y sus comerciantes (Asociación de Comercios de Artesanía y Turismo) mantuvieron con Tolón en el Ayuntamiento, y donde la alcaldesa les explicó que con un presupuesto de 1,3 millones de euros, el Consistorio va a poner en marcha nuevas ayudas específicas por sectores, como el turístico, el comercio al por menor o servicios.
Madruga explica que estos son dos sectores que llevan sin facturar desde marzo del pasado año, con pérdidas del 92 por ciento y el cien por cien, respectivamente. El Ayuntamiento puede con su presupuesto llegar con las ayudas hasta donde puede, «pero necesariamente se deben complementar con ayudas de la Junta y el Gobierno». La primera ayuda a los comerciantes en realidad, pero no a los fabricantes, y Fedeto está trabajando con ella para incluirlos. Pero también, apunta Madruga, deben venir ayudas nacionales. Estos dos sectores tienen 700 empleos directos en Toledo y más de 4.000 en todo el entorno.
Su petición fue que Tolón haga todo lo posible para que a ambos sectores se les considere cadena de valor del sector turístico y el Estado dé ayudas, «porque si no, va a ser muy difícil salir de esta situación». Da la sensación, apunta Madruga, que esta campaña también se va a perder, como la anterior. Por lo que «si no hay ayudas directas de una vez por todas por parte del Estado, que no las ha habido hasta ahora, ni se esperan, las empresas no van a poder aguantar».
El problema, precisamente, es que estas empresas se han olvidado en la cadena de valor del turismo. Para tener ayudas o hacer un Erte, tienen que tener un código de actividad económica para el que las autoridades sanitarias hayan puesto alguna restricción. No ha sido así con estos dos sectores, por lo que se han quedado al margen. Hay problemas para los Erte y las ayudas, cuando en realidad son dos sectores claramente afectados por la pandemia.
Una de las peticiones de Fedeto a Tolón es que tanto el Foro de Ciudades Patrimonio como la Federación y de Municipios y Provincias, así como el Gobierno de España, articulen una modificación de esos códigos de actividad económica para que estos dos sectores sean cadena de valor. De lo contrario, «da la sensación que solo se piensa, cuando se habla del turismo, en la hostelería, que es un pilar muy importante y lo está pasando muy mal, pero pudo abrir un trimestre, cuando hay otros sectores como estos que también precisan de ayudas, o se van a morir».
Además de estas peticiones al Ayuntamiento, Fedeto ya ha comenzado conversaciones con la Junta y el Gobierno, a través de su Delegación, para conseguir estas ayudas «y parece que se han concienciado muy bien». Hay buena voluntad «pero o les ayudamos de alguna manera, o se mueren».
Ayudas. Es cierto, reconoce Madruga, que la Junta está haciendo un gran esfuerzo en cuanto a las ayudas para Pymes y autónomos, en comparación con otras regiones, teniendo en cuenta presupuesto y PIB regionales. Pero los 65 millones de euros se quedan en ayudas de 2.000 a 10.000 euros. De ahí la necesidad de que «el Estado haga lo que debe».
Se refiere Madruga a actuaciones como las que han hecho Alemania u otros países europeos para ayudar a mantener los principales gastos de este tipo de negocios durante el tiempo que duren las restricciones sanitarias. Si no es así, las ayudas municipales y regionales no darán abasto. Pero en España, valora el secretario general de Fedeto, el Estado, desde el minuto uno ha subsidiado al desempleo, pero no ha dado ayudas directas a las empresas (el ICO no lo es). Por otro lado, «los Erte se han convertido en una trampa». El Estado al principio daba ayudas a las empresas con unas condiciones. Según se han prorrogado cada trimestre, se han mantenido las condiciones, y se han rebajado los beneficios. Al tiempo, las ayudas económicas se han vinculado al mantenimiento del nivel de empleo, cuando esto no está ahora en la mano del empresario.
Hostelería. Madruga finalmente se ha referido al auto del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, «que es mortal para muchas autoridades sanitarias de todo el Estado». Porque apunta que no se ha demostrado que la hostería fuera un foco de contagio de lo ocurrido estas navidades. El 80 por ciento de los mismos se debe a contagios familiares y de amistades, cuando todas las medidas recaen «sobre el chivo expiatorio al que se puede controlar». Su temor es que en Semana Santa llegue otra ola, porque la gente cuando se levanta la mano sale sin control.