La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denuncia que, cuando falta una semana para que se produzca el traslado de la Unidad de Salud Mental del Hospital Provincial al nuevo Hospital Universitario de Toledo, previsto para el próximo 12 de julio, aún no se han tomado medidas para garantizar la seguridad de los pacientes y profesionales de este servicio.

CSIF reclama la instalación de cámaras de seguridad en todas las habitaciones, como ya transmitió a la Gerencia mediante un escrito presentado el pasado 1 de junio. El sindicato considera que este instrumento es fundamental y que no tiene sentido prescindir de él cuando se está utilizando actualmente en esta unidad del Hospital Provincial.

Carlos Bueno, delegado de CSIF en la Unidad de Salud Mental, señala que «por nuestra experiencia, por el bagaje que tenemos, sabemos que es una herramienta totalmente necesaria». El Hospital Universitario contará con un total de 30 camas repartidas en 15 habitaciones dobles; entre ellas sólo dos camas cuentan con vigilancia.

No en vano, la falta de vigilancia deja totalmente expuestos a los profesionales, que ya de por sí tienen una enorme responsabilidad, e impide llevar a cabo una correcta atención asistencial; también es importante observar las conductas significativas para mejorar el tratamiento de los pacientes.

La Gerencia del Complejo Hospitalario de Toledo no puede esgrimir argumentos económicos para la instalación de cámaras, así como tampoco puede apelar a postulados de tipo coercitivo cuando este instrumental consistente en una cámara de vigilancia que no graba; son simplemente herramientas de observación.