La talaverana Sandra Sánchez consiguió el oro en en el Torneo de Salzburgo, Serie A, dentro del circuito mundial Karate 1. Mientras que el malagueño Damián Quintero logró la plata. De esta forma ambos demostraron una vez más que la kata española se mantiene en la cima mundial. Sandra Sánchez, actual campeona del mundo en Madrid 2018, se volvió a medir y ganó a su gran rival, la japonesa Kiyou Shimizu, a la que también ganó hace apenas dos semanas en Dubai. Por su parte, el malagueño Damián Quintero, subcampeón del mundo en Madrid, perdió con el también japonés Kazumasa Moto.

A ello hay que sumar que el equipo femenino de kata, integrado por Lidia Rodríguez, Raquel Roy y Marta Vega, se ha colgado el bronce al superar por casi dos puntos de diferencia a Malasia. Las hispanas se vieron superadas por Italia en las dos rondas que se disputaron antes de la clasificación para luchar por las medallas.

La de Salzburgo ha sido la primera prueba internacional en la que ha competido el equipo femenino de katas en lo que llevamos de año, con la incorporación de Marta Vega en lugar de Marta García.

En individual, Lidia Rodríguez, actual subcampeona del Mundo Sub-21, y subcampeona del Mundo y de Europa en kata por equipos en categoría absoluta, ha superado sin dificultad las dos primeras rondas y en la tercera ha quedado en quinta posición, lo que dejó fuera de la lucha por las medallas (ya que sólo se clasifican las cuatro primeras para la ronda final).

A su vez, Sergio Galán,vigente subcampeón del mundo y campeón de Europa en kata por equipos,  finalizó su participación en el puesto 17 de los 285 karatecas que participaban en la modalidad individual masculina.

Ha sido la primera competición internacional, tras la decepción que supone para este deporte el descarte por parte del comité organizador de los Juegos Olímpicos de París 2024, de no incluir al kárate entre los deportes invitados.

Una medida muy criticada por distintos estamentos del deporte y, en especial, por el mundo del kárate que no entiende que un deporte practicado por más de cien millones de personas y que debutará en unos Juegos en Tokio, se quede fuera incluso antes de su primera comparecencia. Una cuestión que no dejará de estar presente en los tres días que dure la competición austriaca.

De hecho, la Federación Internacional ha iniciado una campaña, #TsukiForKarate2024”, para que este deporte esté en París 2024. Con ella se quiere mostrar la unidad de este deporte y solicitar su inclusión en el programa de París.