Enfado de Latido Animal tras la denuncia a una voluntaria

J. Monroy
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La joven estaba, a petición de la Escuela de Adultos del Polígono, capturando una gata, cuando la Policía Local la denunció por dar de comer a animales

Enfado de Latido Animal tras la denuncia a una voluntaria - Foto: ignacio lopez

Enfado mayúsculo el que vive la asociación animalista toledana Latido Animal, tras la denuncia que recibió una de sus voluntarias por parte de la Patrulla Verde de la Policía Local cuando trataba de capturar una gata en las instalaciones de la Escuela de Adultos del Polígono. De poco sirvieron sus quejas y que la asociación aportara la petición por escrito del centro para hacer el trabajo.

Un trabajo, este de captura, esterilización y suelta que recuerda Latido Animal que le está haciendo gratuitamente al Ayuntamiento, cuando en realidad sería labor suya. Fue en la noche del 29 de enero cuando varios miembros de Latido Animal y la perrera municipal San Bernardo estaban volviendo a intentar la captura de una gata en celo para esterilizarla, que se llevaba escapando dos semanas.

Había voluntarios en el interior del edificio y otros fuera, para evitar que el animal huyera de nuevo. Habían colocado cebos en jaulas trampa para la captura. De forma que, explica la presidenta de la asociación, Delia Fernández, alguien tuvo que hacer una llamada y la Patrulla Verde fue directa por su voluntaria, con una bolsa de plástico con comida, y la denunció, «aunque se lo explicaron y no hubo manera, la denunciaron por alimentar y ya está».

Apunta Fernández que el Ayuntamiento se escuda en una ordenanza municipal que prohibe alimentar animales en la calle, pero «saben perfectamente que por encima está la ley nacional». Y esta apunta que cualquier animal callejero tiene derecho a alimentación y cobijo, sobre todo por parte de las protectoras. También Europa les da la razón, apunta Fernández, convencida de que «no todo el mundo puede alimentar a su libre albedrío, pero somos una protectora controlada que hace un trabajo gratuito al Ayuntamiento».

Desde lo ocurrido, la asociación ha tratado de ponerse en contacto con Medio Ambiente del Ayuntamiento, pero este fin de semana no había obtenido respuesta. Por lo tanto, apunta Fernández, ha decidido realizar una denuncia o se produce una rectificación por parte del Ayuntamiento. Quiere saber el porqué de esta denuncia, cuando hay un escrito de la Escuela de Adultos solicitando la captura.

A partir de ahí, las protectoras de la ciudad están tratando de coordinarse para pedir una reunión al Ayuntamiento en la que tratar esta denuncia y la alimentación.

Antecedentes. El cabreo es mayor en el seno de la protectora cuando ve que la Policía Local le denuncia a ella, pero no a quienes abandonan a sus mascotas, delito tipificado en el Código Penal.

Y durante las últimas semanas, se han dado varios casos de esto último en Toledo. El 26 de enero por la noche la Policía Local recogía seis cachorros de perro abandonados en dos cajas de cartón en Zocodover y los depositó en la perrera. Como las instalaciones de estas no están acondicionadas para cachorros, ha sido Latido Animal quien los ha acogido de forma provisional. Y una día más tarde, en la propia Escuela de Adultos del Polígono dos chicos abandonaron a diez cachorros de gato. Se pregunta Fernández qué avances ha habido en las investigaciones de estos dos delitos.