Quinto año de la iniciativa y un reto especial, superar esos 1.500 participantes anuales. La Iglesia disfrutará el próximo sábado de la V Fiesta por la Mujer y la Vida, bajo el lema Viva la vida, en el colegio Nuestra Señora de los Infantes y un año más la recaudación se destinará al Proyecto Mater de Cáritas Diocesana, una iniciativa que surgió hace cuatro años para dar apoyo a las madres en riesgo de aborto y a las que han abortado.

La presentación del evento contó con un invitado relevante, el arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez Plaza, en su último acto oficial, puesto que el próximo sábado tomará posesión el nuevo arzobispo, Francisco Cerro, horas antes de esta fiesta. De esta manera, Cáritas Diocesana y la Iglesia en general agradecen su «valiente e incansable lucha» en defensa de la vida.

Rodríguez Plaza recordó que «el problema del aborto es una realidad bastante presente», así que entiende que iniciativas como la programada ayudan a visibilizar la defensa de la vida. Además, añadió su desacuerdo con la ley, «inaceptable también para los católicos» porque cree que a las mujeres embarazadas «se les puede ofrecer  muchas posibilidades». Si bien, subrayó que  con esta fiesta la Iglesia «no quiere ir en contra de nadie, sino en favor de la vida».

En este caso, insistió:«Si no hay nuevas generaciones la ida se vuelve contra nosotros mismos». Y añadió que las estadísticas de nacimientos en España son muy bajas y «son  muchas más mujeres que han venido de fuera» las que tienen hijos. El arzobispo señaló que no se realiza «ninguna discriminación» porque la fiesta se centra en todas las mujeres y este año se hace hincapié también en las víctimas de violencia de género.

Por su parte, la coordinadora del  ára de Familia del Proyecto Mater de Cáritas, Alicia Medina, resaltó el apoyo de Rodríguez Plaza y avaló la actividad del Proyecto Mater, que cuenta «con 95 bebés nacidos» en estos cuatro años y actualmente apoya a cinco embarazadas. El proyecto se sustenta gracias al apoyo de la Iglesia y las aportaciones, porque no dispone de subvenciones públicas, por lo que este tipo de fiestas reivindicativas ayudan a mantenerlo en pie. El evento cuenta por quinto año con el patrocinio de Pulsera Turística de Toledo y la colaboración de más de 40 empresas y entidades que han demostrado su sensibilidad.

También la representante de las empresas colaboradoras, Pilar Rubio, remarcó que todas estas empresas «tienen que estar al servicio de la sociedad y del bien común» y aprovechó para referirse al ámbito laboral y dar un tirón de orejas a la política en general por las dificultades de conciliación con la vida familiar.

el evento. Un centenar de voluntarios velará por la buena organización de esta fiesta, que incluirá una carrera absoluta,  de cinco kilómetros, una marcha, carreras infantiles, actuaciones musicales, talleres de ocio, mercadillos solidarios, entre otras iniciativas. Además, está previsto dar a conocer a los ganadores del concurso ‘Canta por la vida’, que proceden de dos parroquias y cuatro colegios diocesanos presentados.

Tras la presentación, Cáritas entregó un recuerdo del Proyecto Mater, elaborado por los alumnos de Aspace, a las empresas fieles con su apoyo y Emilio Palomo, delegado episcopal de La Mancha, uno de los impulsores de esta iniciativa.