Los autónomos y las pequeñas empresas de Toledo capital (no más de 10 empleados) que como consecuencia del crisis del covid hayan tenido que cerrar o han visto reducido su volumen de negocio hasta un 60% deben estar atentos porque el Ayuntamiento va a sacar «cuanto antes» una convocatoria de subvenciones (máximo 1.000 euros a fondo perdido) con el objetivo de ayudarles a cubrir gastos. Como contrapartida deben acreditar (a fecha 31 de marzo del año que viene) que mantienen el 80% del empleo que tenían en el momento de decretarse el estado de alerta (13 de marzo pasado). Las peticiones se irán tramitando por orden de llegada hasta que se acabe el medio millón disponible (si se consigue más dinero se retomará el reparto desde el siguiente en la lista).
La medida obtuvo el acuerdo de todos los concejales que participaron en la Comisión de Promoción Económica. Lo que más preocupa es la agilidad en la tramitación para llegar a tiempo de que esta ayuda, relativamente modesta, sirva a que las micro pymes de la ciudad sobrevivan.
Un inconveniente es que la convocatoria tiene que publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia y por las fechas es factible que eso ocurra en agosto y coja a muchos de vacaciones.
Para agilizar el proceso en lugar de esperar a que cada solicitud venga acompañada de la documentación que se exige valdrá con una declaración de intenciones del interesado (vía telemática a través https://sede.toledo.es ) que después tendrá 20 días para remitir los papeles.
Propuestas y dudas. Juan José Alcalde, del PP, propuso (y se va a estudiar si es posible) que se incrementen las ayudas para los empresarios de menos de 35 años porque una parte del dinero (100.000 euros) sale de las partidas de Juventud que se anulan por las restricciones del covid.
Otro aspecto que se analizó fue la fiscalidad de las ayudas ya que el PP teme que algún empresario se vea abocado al cierre cuando Hacienda le haga cotizar por las subvenciones a las que hay tenido acceso. En este punto Alfonso Corrales es más partidario de conceder bonificaciones de tasas e impuestos que de dar ayudas directas pero el concejal de Promoción Económica, Francisco Rueda, recuerda que eso se ha descartado porque aminora los ingresos y obligaría a recortar otros gastos.
Por su parte, José María Fernández, portavoz de IU-Podemos, es contrario a las exenciones de tributos y tasas y prefiere las ayudas directas. Además da su aprobación al extra de ayuda para empresarios jóvenes si bien hace hincapié en que los 100.000 euros de Juventud eran para actividades contratadas a agentes externos y no para políticas destinas a jóvenes.
Araceli de la Calle, de Ciudadanos, lo que pide es que el observatorio creado por el área de Rueda se utilice para auditar en qué medida estas ayudas que se van a conceder sirven para el objetivo que se busca. Finalmente, a petición de María Ángeles Ramos, de Vox, se aclara que las empresas con empleados en ERTE que quieren optar a las ayudas tendrán que haber sacado de esta situación al 80% a 31 de marzo de 2021, o se les exigirá que lo devuelvan.