Brecha salarial; precariedad; techo de cristal; mirada parcial y preocupación por los enfoques; ninguneo, condescendencia, paternalismo; priorización del presentismo y la libre disposición; ausencia de conciliación real; acoso laboral y en redes. Estas fueron algunas de las reclamaciones que, en la Plaza del Ayuntamiento, las mujeres periodistas/comunicadoras de medios, agencias de comunicación o gabinetes de prensa legaron a las voces de Francisca Bravo, Cristina López Huerta, Aurora de Pablos, Cristina Copado, Lidia Yanel y Carmen Herrero.
Participes del manifiesto que dentro de las intervenciones del Día Internacional de la Mujer se explicitan en el texto #LasComunicadorasParamos, las mujeres reunidas apostaron por «por un periodismo digno y feminista» que incorpore «en su línea editorial los valores de igualdad, equidad y libertad». Y puesto que, como en el resto de profesiones la precarización la padecen en mayor medida las mujeres, se hizo constar que las informaciones deben «ir en contra de cualquier discriminación hacia la mujeres», atendiendo especialmente «a las noticias sobre violencia y mercantilización de sus cuerpos».
En este punto, e instando a «poner el foco en el agresor, en las noticias sobre violencia machista, y no en la víctima», las comunicadoras reunidas en Toledo recordaron que en todas las noticias relativas a estos hechos «se debe incluir la cifra de mujeres asesinadas desde 2003, año desde que existe un registro». En concreto son 984.
Porque el feminismo es necesario para mejorar el periodismo - Foto: VÁctor BallesterosSobre la «mercantilización de los cuerpos de las mujeres», se exigió «un periodismo que se rija por criterios de profesionalidad y no basados en la imagen» como ocurre en el caso de las profesionales de televisión. De ahí que, claro está, las mujeres apuesten por un trabajo que «desmantele los estereotipos y los prejuicios sobre las mujeres» y que, por ello, utilice «datos desagregados por sexo para demostrar la desigualdad real».
Y puesto que «lo que no se nombra no existe», las mujeres reunidas clamaron por un «periodismo digno que debe ser inclusivo en su lenguaje» hasta «que los estereotipos que se esconden en las palabras no nos hagan desaparecer».
No olvidaron, las periodistas y comunicadoras de Toledo, reivindicar «una periodismo social en el que se otorgue más protagonismo a asociaciones y voluntariados, y menos al periodismo de declaraciones políticas». De la misma forma, se exige a las empresas «delegadas de igualdad de género en todas las redacciones», y a la Administración «que solicite estos certificados a todas las empresas de comunicación antes de conceder subvenciones».
Porque el feminismo es necesario para mejorar el periodismo - Foto: VÁctor BallesterosSin perder de vista la importancia de la educación en esta lucha permanente, el manifiesto reservó la solicitud, a l ámbito universitario, para que se atienda «una formación especializada en periodismo feminista y cursos para profesionales en activo». Lo que debería unirse a la creación de un «observatorio de noticias, dependiente del Ministerio de la Presidencia, donde se denuncie el periodismo machista».
Todas estas medidas serán reivindicadas, se advirtió, hasta que se consigan porque, estando los tiempos tan oscuros en materia de igualdad real y efectiva, el colectivo trabajará para «no dar ni un paso atrás». Las firmantes de este manifiesto se han sumado a las miles de movilizaciones convocadas por este sector profesional que, desde hace años, «lucha contra la brecha salarias, contra la precariedad y contra los enfoques parciales».