Una visita con posibles buenos frutos. Apanas (Asociación Provincial de Familias con Personas con Discapacidad Intelectual y del Desarrollo) ofreció esta mañana una visita guiada por el centro ocupacional que mantiene en el Polígono Industrial para que el coronel director de la Academia de Infantería de Toledo, Antonio Armada, actual padrino de Marsodeto, pudiera conocer de cerca y en profundidad el trabajo que realiza esta asociación desde los años 60.
Si bien, la iniciativa dio más de sí y la gerente del colectivo, Sagrario Balmaseda, explicó que Apanas trabaja sin descanso siempre para conseguir más recursos, más líneas de actuación y más oportunidades de formación y capacitación para el empleo, lo que obliga a firmar continuos convenios de colaboración con las administraciones y otras entidades privadas. En este contexto, lanzó la posibilidad de firmar un convenio de colaboración con la Academia de Infantería, que podría convertirse en un buen espacio para prácticas y el desempeño de algún puesto laboral, una propuesta que Armada se comprometió a estudiar con detenimiento.
Balmaseda informó al director de la Academia de Infantería sobre las sedes actuales que mantiene Apanas, incluida la residencia y centro de mayores de la calle Oslo, enfocada principalmente a personas mayores de 50 años con necesidades especiales, y recalcó la importancia de la formación a través de los dos centros ocupacionales abiertos en la ciudad, uno en el Polígono Industrial y otro en San Pedro el Verde para cincuenta usuarios. En este caso, la gerente apuntó que el centro especial de empleo se reconvirtió hace tiempo en taller ocupacional y actualmente enseña oficios como jardinería, limpieza, mantenimiento de instalaciones, lavandería y labores relacionadas con la madera.
recursos. La reconversión del centro también obligó a llevar a cabo una rehabilitación, una obra que plantearon y ejecutaron los usuarios de Apanas, muy orgullosos con los resultados. Balmaseda también considera imprescindible seguir avanzando hacia los certificados de profesionalidad. De momento, no se ha expedido ninguno, pero Apanas tiene tres acreditados -limpieza, jardines y actividades administrativas básicas- y quiere conseguir la correspondiente acreditación para poder impartir otros tres, ya que se trata «de una formación muy necesaria de cara a la incorporación al empleo».
En principio, Apanas mantiene a quince personas trabajando en jardines y tiene firmados convenios de colaboración con el Ayuntamiento y con algunas comunidades de propietarios. En este sentido, Balmaseda considera que el objetivo prioritario es que las prácticas laborales o el desempeño de las actividades laborales se realicen en el entorno. De esta manera, el año pasado el colectivo incorporó a 25 usuarios al empleo gracias a varios acuerdos de colaboración.
Apanas, colectivo formado por 500 familias, atiende a 300 usuarios gracias el esfuerzo y el trabajo de 115 profesionales y de un numeroso grupo de voluntarios que ronda las 50 personas. La asociación «va tocando todas aquellas necesidades que van trasladando las familias», más allá del tema laboral, ya que también enfocan la formación para el desarrollo de una vida lo más autónoma posible. Y ahí juega un papel fundamental las viviendas tuteladas. De momento, tienen seis habilitadas, en las que residen 36 personas actualmente, y el colectivo tiene en marcha un proyecto para adquirir dos viviendas tuteladas más.
Antes de la visita, Armada agradeció la dedicación de Apanas. «Estoy impresionado y me parece una labor magnífica y de una gran transcendencia porque cambiáis la vida de las personas y de sus familias y les dais una oportunidad a todas estas personas con capacidades distintas para que crezcan todo lo que puedan crecer».