Esta semana han comenzado los trabajos para consolidar el puente que sustenta la tubería de abastecimiento de agua que baja desde la depuradora del Cerro de los Palos para dar servicio a los barrios de Santa Bárbara y el Polígono.
Los tres episodios de lluvias torrenciales que sucedieron el pasado mes de septiembre provocaron la crecida del arroyo de la Degollada, por el discurre el puente, arrastrando la fuerza del agua toda la tierra y vegetación del cauce, dejando la piedra totalmente limpia y al descubierto.
El arrastre tuvo tanta fuerza que dejó uno de los pilares sin sustentación, ya que el agua se llevó el lecho donde apoyaba.
Aunque no existía un riesgo grave de que el puente sufriera una rotura, los trabajos de reparación se han acelerado al máximo por parte del Ayuntamiento de Toledo y la empresa concesionaria del servicio de agua.
Los operarios llevan ya unos días en la zona, encofrando y reparando los soportes, que quedaron totalmente suspendidos en el aire.
El arroyo de la Degollada fue uno de los que más agua desplazó en la DANA de septiembre, dejándose notar especialmente en el tramo urbano de Cobisa.
La cantidad de agua permitió que muchos toledanos pudieran ver el espectáculo de las cascadas en la zona de la Degollada, una oportunidad que también se vio tras las nevadas de Filomena pero que hacía más de 40 años que no se producía.
Con el arreglo de este puente, se sustenta la tubería de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) del Cerro de los Palos hasta el Polígono sin que exista ya riesgo de rotura y pérdida de suministro.