Brote de coronavirus en centro de mayores con 18 afectados

Lola Morán Fdez.
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El brote se ha detectado en el centro Casablanca tras hacerle una PCR a una usuaria que iba a trasladarse a otra residencia. Todos los afectados son asintomáticos y permanecen en cuarentena desde que se detectaron los positivos

Brote de coronavirus en centro de mayores con 18 afectados

Un total de 15 usuarios y 3 trabajadores del centro de mayores Casablanca de Talavera han dado positivo por coronavirus. Así lo ha confirmado a este diario el director general del centro, Ignacio Fernández-Cid, quien ha precisado que todos los afectados son asintomáticos y permanecen en cuarentena desde que se tuvo constancia de los positivos por Covid y por el momento durante un periodo de 15 días.

Tal y como ha explicado Fernández-Cid, el primero de los casos se detectó cuando se le realizó una PCR a una usuaria que se iba a trasladar desde este centro a la residencia de mayores gestionada por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Por protocolo y por prevención se le realizó esta prueba el pasado lunes y el miércoles comunicaron al centro que el resultado era positivo. Por este motivo, desde la unidad de seguimiento de residencias se comunicó que se harían PCRs a todos los residentes y a todo el personal del centro.

«A las dos horas, están en el centro ya tomando muestras para todos, residentes y personal», explica el director, quien añade que previamente ya se había aislado a la usuaria con un positivo por coronavirus confirmado, ante la imposibilidad de su traslado por esta situación.

Tras la toma de muestras a todos los residentes y el personal del centro, a lo largo del jueves fueron trasladando los resultados de las pruebas y esa misma tarde se confirmó que eran un total de 15 residentes de los 82 que hay en total -uno de ellos en el hospital pero por otros motivos- los que habían dado positivo por Covid y también 3 miembros del personal, que cuenta con cerca de medio centenar de trabajadores, «todos asintomáticos».

Ya el miércoles se informó a las familias del primer caso y ayer jueves, al tener constancia ya del resto de positivos, se remitió un correo a todas las familias comunicando la situación y que, a causa de ella, se interrumpían las visitas y se procedía al confinamiento de todos los residentes en sus habitaciones.

También se procedió ayer a llevar a cabo una redistribución de todas las habitaciones para situar a los 15 positivos en la misma zona, en el área más apartada del centro para evitar el paso por ella. En cuanto a los trabajadores que han dado positivo por Covid, permanecen aislados en sus domicilios.

Se procede además a diario a desinfectar todas las estancias, tanto habitaciones como zonas comunes, algo que se hacía con anterioridad pero que ahora se ha reforzado, tal y como destaca el director general del centro.

Fernández-Cid destaca «lo rapidísima que ha sido la actuación del sistema público de salud» desde que se detectó el primer positivo. «Esa es la coordinación que necesitamos», recalca, «a toda velocidad proceder a hacer las PCR tanto a residentes como a trabajadores y poder actuar con criterios, si no iríamos con los ojos cerrados». «Si tardasen equis días en venir a hacernos esos estudios, imagina cuántos afectados podría haber, pues todos», apostilla.

Ahora la situación está controlada desde Salud Pública, desde donde el seguimiento es «continuo» y desde donde marcan las pautas a seguir, si bien desde el centro permanecen atentos a cualquier posible sintomatología.

Fernández-Cid traslada que en el centro existe tranquilidad «porque se están haciendo bien las cosas». «Cuando tú das el aviso también te da mucha tranquilidad que el sistema público de salud se vuelque en el minuto cero porque que desde el aviso hasta que vengan a hacer las muestras pasen solo dos horas es algo a destacar», recalca.

Esta misma tarde se repetirán las pruebas PCR y les harán un test serológico a todos los residentes y al personal para conocer la evolución de este brote.

En cuanto a las familias, el director general precisa que durante el periodo en el que estaban permitidas las visitas, éstas se hacían con todas las medidas de seguridad, con equipos de protección, mamparas entre el residente y el familiar y sin contacto físico. Por ello, señala que «no debiera haber» positivos en familiares, aunque se les ha dado traslado de la situación «para que cada uno actúe en consecuencia».