Fernando Lominchar ya trabaja desde el pasado martes con el CD Villacañas 2019/20. Arranca la tercera pretemporada consecutiva de los rojillos en el Grupo XVIII de Tercera División con una plantilla «prácticamente definida» a falta de un par de retoques, como asegura el entrenador. Y es que, al margen de los veinte jugadores actuales (nueve renovados y once fichajes), hay unos cuantos a prueba de cara a su posible incorporación.
En principio, el centro de la defensa y el ataque por banda son las posiciones que ahora mismo están un poco cojas para el nuevo técnico, pero la idea es fichar a futbolistas que sean polivalentes y así matar dos pájaros de un tiro. «Con el presupuesto que tenemos, hay que amoldarse a una serie de condiciones», asegura Lominchar, que, en cualquier caso, está muy contento con el grupo que se ha configurado.
Y es que, él mismo lo define como «una mezcla de jugadores con experiencia y otros de cantera que vienen pidiendo paso con ímpetu y ambición». La realidad es que la edad media del plantel no es muy alta, pero hay un grupo de futbolistas que, a pesar de su edad, acumulan un buen número de encuentros en la categoría, como Gonchi, Alfre Ramos o Manu Ruiz. En el otro cajón están los casos de Antonio García de Blas, que viene de ser uno de los delanteros más determinantes en el Grupo II de Preferente pero que no ha debutado en Tercera.
En una situación similar se halla el propio Fernando Lominchar, que sólo cuenta con una experiencia como primer técnico, en el CD Villa y en Primera Autonómica. De todos modos, tiene los pies en el suelo y considera que «al Villacañas no se le puede pedir otra cosa que la permanencia», algo que ya consiguió en los dos últimos cursos, de la mano de Faustino Manzanero. De momento, el conjunto toledano se ejercita por las tardes en el campo de Las Pirámides, donde precisamente este domingo disputará su primer encuentro amistoso a partir de las 20:30 horas. Es el Trofeo de Ferias de la localidad y se medirá al Unión Criptanense, que acaba de subir a Preferente.