El Valencia Basket logró su tercera victoria consecutiva en la Euroliga, las dos últimas en la misma semana, después de imponerse al Khimki Moscú en La Fonteta (89-84) en un partido muy trabajado por los taronjas gracias al buen hacer de Quino Colom y a la decisión de Bojan Dubljevic, máximo anotador de los locales con 18 puntos.

El equipo de Jaume Ponsarnau, que estaba en el alambre hace menos de un mes, ha levantado el vuelo después de conseguir su cuarta victoria en las cinco últimas jornadas de Euroliga. Un balance que aleja los fantasmas y le mete de lleno en la pelea por estar con los mejores en el Viejo Continente. Una magnífica forma de enderezar el dubitativo comienzo de curso.

El partido arrancó torcido para un Valencia Basket que sufrió la ira de su rival. Los rusos llegaron heridos a la capital del Turia después de ser apalizados ante el Real Madrid el pasado martes y pronto intentaron sacarse la espina. La gran diferencia en el rebote y el acierto del tiro exterior dio ventajas suculentas al conjunto de Rimas Kurtinaitis.

El Valencia cierra su 'semana fantástica' - Foto: Miguel Ángel Polo

La mayor diferencia fue el 4-20 a los cinco minutos que hizo saltar las alarmas en el conjunto local. Colom aceleró el ritmo de los suyos y Motum anotó un triple que devolvió la esperanza. En apenas dos minutos, el marcador se situó en un 20-26 que equilibró la contienda, sobre todo porque el Valencia Basket apretó más en defensa.

Mike Tobey también quiso formar parte del resurgir con varias canastas que siguieron igualando el choque -sumada la gran aportación de Abalde bajo el aro- dejando el 35-38 a cinco minutos para el descanso y el 51-48 antes de volver a los vestuarios, una de las primeras ventajas para el Valencia Basket, que ya había encontrado el camino.

A partir de ahí, el electrónico fue un acordeón que fluctuó en favor de unos y de otros en función de la inspiración de sus pívots. Dubljevic se entonó más rápido y lideró un parcial de 9-0 que permitió creer a los de casa. Sin embargo, el Khimki no quiso hincar la rodilla antes de tiempo y volvió a renacer de la mano de Jerebko, que logró cuatro triples, los mismos que Stefan Jovic.

Entre ambos devolvieron la emoción al encuentro (67-68, min.29) y fue el momento -otra vez más- de que apareciese Colom desde la media distancia. El andorrano fue el más inteligente de todos, asistiendo cuando había que hacerlo (11 entregas) y definiendo cuando era necesidad: en total, 12 puntos y 22 de valoración.

Un triple suyo desniveló el marcador nuevamente a su favor, Booker colaboró con una falta antideportiva y Dubljevic se encargó de rematar la faena con una canasta majestuosa desde el costado. El triunfo pone alas a un Valencia que ha firmado su semana fantástica para renacer en la Euroliga.