El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo dio ayer un paso más para sacar adelante los presupuestos del año 2020 tras solventar la demora de la aprobación definitiva de las ordenanzas fiscales. Y es que, para conocer los ingresos con los que contará el Consistorio el próximo año es necesario dar luz verde primero a las ordenanzas fiscales.
Así, cumpliendo el guión establecido, la Comisión de Hacienda presidida por la concejala del área, Mar Álvarez, dictaminó a lo largo de la mañana de ayer a favor de la propuesta de Ordenanzas Fiscales Reguladoras de Tributos y Precios Públicos para el ejercicio 2020 que irá a Pleno Municipal para su aprobación definitiva la próxima semana, concretamente el lunes.
Las ordenanzas de cara al próximo ejercicio contemplan la rebaja en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, el mantenimiento de las tarifas de la ORA y de los autobuses urbanos, un incremento en la bonificación del 50 por ciento del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras en determinado tipo de instalaciones y sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de energía por autoconsumo.
También incluyen bonificaciones a desempleados en la ordenanza de Expedición de Documentos; y bonificación de hasta un 95 por ciento del Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana en las transmisiones de propiedad por causa de herencia, una reseña que atiende por parte del Gobierno de la alcaldesa Milagros Tolón a uno de sus compromisos en materia económica y fiscal, además de recoger la cuestión planteada por diferentes organizaciones y grupos municipales.
Con esta propuesta de Ordenanzas Fiscales, el Gobierno municipal, tal y como afirman en nota de prensa «da respuesta a los compromisos adquiridos con los toledanos en el área de Hacienda, además de mantener las tasas dentro de los márgenes de crecimiento del IPC interanual, a excepción de la ORA y los autobuses urbanos que se congelan y mantendrán los valores de años anteriores».
Oposición. Las Ordenanzas Fiscales van ahora a Pleno, gracias a los votos a favor de PSOE, y la abstención de UP y el concejal no adscrito, tras el rechazo de PP, Cs y Vox; todo ello en una Comisión en la que, en realidad, lo que se debatió fue la toma en consideración o no de las alegaciones de Fedeto.
Al final solo se han aceptado dos. El problema es que, según el informe municipal, las asociaciones solo podían alegar sobre las ordenanzas fiscales modificadas por el Gobierno.
En concreto, Fedeto hablaba del IBI, y para el PP habría sido posible tomarlas en consideración, porque en su día se aprobó una alegación de UP sobre el asunto. Al final no ha sido así, para el enfado de los ‘populares’, explicó Claudia Alonso, más además, cuando el informe no estaba ni sobre la mesa. El PPvolvió a votar en contra de esta aprobación de las Ordenanzas.
Por su parte el portavoz de Cs, Esteban Paños, apuntó la incoherencia de que se hayan rechazado las alegaciones de Fedeto. Lo curioso, destacó, es que se permite alegar a las asociaciones en cualquier momento, menos justo ahora. De ahí que pidiera que se cambie el reglamento para que se puedan modificar las ordenanzas. Por lo demás, Cs volvió a rechazar las Ordenanzas, como en la aprobación inicial.
Finalmente, UP también repitió el voto de la aprobación inicial, y se abstuvo. Fue así, apuntó Txema Fernández, por la ausencia de modificaciones que le inviten a votar a favor o en contra. UP propuso en su momento excenciones al IBI, que al final no se recogieron, pero sí ha visto en los presupuestos cuantías para facilitar el pago del IBI o el acceso a la vivienda.