El Talavera toma aire ante un Bilbao Athletic sin colmillo

Nekane Ibarrondo (ADG Bilbao)
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El equipo de Víctor Cea encadena su segunda victoria consecutiva fuera de casa al imponerse en Lezama por 0-1 gracias al tanto de Adighibe

Foto de la celebración blanquiazul por la victoria en Bilbao. - Foto: CF Talavera

El Talavera volvió a la senda del triunfo después de vencer en Lezama ante el Bilbao Athletic. Una alegría bien justificada por lo igualado del choque, sumada a la buena lectura que realizó el banquillo liderado por Víctor Cea dentro de un pulso que tuvo rigor táctico y desgaste físico a partes iguales. Tres puntos que, además, gozan de valor doble por tratarse de una cita con un rival directo en la pelea por escapar de la zona más peligrosa. Y es que, pese a que el filial bilbaíno no conoce la victoria desde septiembre, este domingo se mostró como un enemigo muy difícil de doblegar.

Los nervios y, como consecuencia directa, las imprecisiones que generaron constantes balones divididos se convirtieron en los elementos dominadores de un comienzo con escaso fútbol. Nada extraño teniendo en cuenta la mochila con la que se presentaron ambos planteles. Quiso el Talavera echar la pelota al césped de Lezama frente a un filial con un juego más directo, decidido a saltarse líneas con pases verticales que siempre tuvieron como destino preferente los costados.

Casi diez minutos necesitó Añón para fabricar la primera ocasión con una acción individual cuyo centro blocó con mucha seguridad Aguirrezabala. La llegada espoleó a unos futbolistas que decidieron acorralar a los cachorros de Lezama. Ganó en dinamismo el duelo gracias al buen hacer del bloque alto del Talavera, siempre trazando triangulaciones y generando desequilibrios en la zaga local. De ese modo llegó un lanzamiento de falta protagonizado por Víctor Ruíz con un disparo centrado que el guardameta necesitó mandar a córner.

A base de orden superó el mal momento un Bilbao Athletic que pronto recuperó su imagen de equipo bien armado, con filo en las bandas y con Tascón siempre dispuesto a jugar de espaldas a la portería. El menudo delantero vizcaíno fue un quebradero de cabeza con su movilidad y sus apariciones fuera del radar de los centrales forasteros. Volvió el envite a una fase de calma tensa, con poca actividad en las áreas y mucho trabajo cerca del círculo central.

En el arranque de la segunda mitad, Víctor Cea protegió a los suyos con la retirada del campo de Borja Díaz, amonestado en el primer acto, para dar entrada a Jordi Ortega. El once cerámico, que muy pronto dispuso de un tres para tres muy mal ejecutado por Ceberio en el carril central, salió mejor de los vestuarios. Dio la réplica correspondiente el cuadro local con una contra muy vertical que abortó la zaga cuando Tascón se disponía a encarar a Edu.

El preparador madrileño recompuso su once con la entrada de Adighibe como punta de lanza. El ariete nigeriano resultó decisivo y muy pronto se las vio con los espigados centrales rivales para ganar los balones aéreos generando segundas opciones a sus compañeros. Fue un cambio de planteamiento que, sin embargo, no sirvió para alegrar un aperitivo mañanero que quedó muy soso. El ambiente plomizo, gris, con lluvia intermitente, se adueñó del decorado de uno de los partidos más tediosos que ha protagonizado el Talavera durante el presente curso liguero.

Todo cambió en la última media hora. A primera vista, el Bilbao Athletic lució su mejor versión dispuesto a dejar la victoria en casa. Subió de revoluciones el ataque de Imanol de la Sota, que encontró en un cabezazo de Diarra al poste derecho la mejor opción para estrenar su casillero en el marcador de Lezama. No se hizo esperar la respuesta, fulminante, del Talavera. Un saque de córner botado por Víctor Ruíz lo luchó Javi Domínguez para permitir que Adighibe remachase en boca de gol tras adelantarse en el cuerpeo con los centrales. A punto estuvo el goleador de firmar su segunda diana en un balón muy largo al que por centímetros llegó antes Paredes jugándose el penalti. El dominio cerámico tuvo continuidad con un posible penalti no señalado sobre Añón tras una maniobra muy habilidosa por parte del atacante coruñés.

El trabajo de desgaste desarrollado por la armada de Víctor Cea castigando a la medular rival dio sus frutos en un desenlace donde los de casa solo pudieron hacer daño a través de un pase muy profundo en el que estuvo más atento Javi Domínguez que Nico Serrano. Escaso bagaje para intentar las tablas ante un colectivo talaverano que demostró carácter y personalidad hasta el pitido final.  

 

FICHA TÉCNICA

Bilbao Athletic: Aguirrezabala; Jaso, Núñez, Paredes, Oier López; Beñat Prados, Diarra (Víctor, min. 72); Goti (Ibai Sanz, min. 67), Nico Serrano; Artola (Guruzeta, min. 72) y Tascón (Cabo, min. 67).

Talavera: Edu; Choco (Juanma, min. 88), Víctor Ruíz, Bourdal, Nicho (Javi Domínguez, min. 57); Vicente, Ceberio; Borja Díaz (Jordi Ortega, min. 46), Dani Pichín, Añón (Toño Calvo, min. 81); y Perales (Adighibe, min. 57).

Árbitro: Pardeiro Puente (Comité cántabro).  Amonestó al local Paredes y a los visitantes Borja Díaz, Nicho, Javi Domínguez y Añón. Expulsó a un miembro del cuerpo técnico del Talavera (min. 75).

Gol: 0-1 Adighibe (min. 65)

Lezama. 550 espectadores.