Toledo no es una ciudad desconocida para el rey Felipe VI. La ha visitado en numerosas ocasiones como príncipe y como monarca. Pero su presencia siempre despierta curiosidad. Y este miércoles no fue una excepción. El público se congregó en la subida del Miradero durante la mañana y en los balcones de los edificios próximos al Palacio de Congresos, donde incluso ‘se coló’ una bandera republicana. Felipe VI llegó a eso de las once para participar en un encuentro sobre perspectiva de género e igualdad organizado con motivo del 40 aniversario de la incorporación de la mujer a la Policía Nacional.

Había público, pese a la hora, pero daba la sensación de que había más agentes que ciudadanos. La llegada del rey contó con un fuerte dispositivo de seguridad durante toda la mañana en Toledo, especialmente en el entorno del Miradero. Se pudieron ver incluso neutralizadores de drones.

De hecho, algunos de los efectivos ayudaron al público, a subir y bajar carritos por las escaleras del Miradero, incluso a facilitar el tránsito por el Casco a señoras mayores.

El rey despierta la curiosidad en Toledo - Foto: David PérezEntre el público no pasó inadvertida una presencia. Se trata de Buenaventura Pérez, vecina de San Pablo de los Montes, quien lleva años siguiendo al monarca siempre que puede en sus actos. Lo hizo vestida con el típico traje toledano que ya llevó en la boda de Felipe VI con la reina Letizia en La Almudena en 2004 o en la visita de los reyes -entonces príncipes- en 2014 a Toledo para visitar la exposición en homenaje al Greco.

Las curiosidades de la jornada también se vivieron dentro del auditorio. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, coetáneo del rey, felicitó a Felipe VI por los discursos pronunciados por su hija, la princesa Leonor, en los últimos días. Explicó que él también tiene dos hijos, la mayor de ellos ya en la universidad, porque él se animó antes que el rey a ser padre.

También recordó una de las anécdotas que siempre cuenta, y es que su actual despacho está en lo que fue el dormitorio de Carlos V, aunque dijo sentirse especialmente orgulloso de la historia de España de los últimos 40 años.

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