Iris Agudo devolvió a Yepes todo el cariño recibido durante su participación en los INAS Global Games. La nadadora tuvo la ocasión de mostrar sus medallas de oro y bronce a los vecinos tras el recibimiento que le brindó el Ayuntamiento de la localidad, con el alcalde, Tomás Arribas, a la cabeza. Fue un acto sencillo pero muy emocionante que acabó con el ‘We are the champions’ para la que será siempre una de sus vecinas más ilustres.

Iris no perdió nunca esa sencillez que le caracteriza y así lo mostró desde la firma en el Libro de Honor del consistorio yepero, donde dio las gracias por todo el apoyo a pesar de encontrarse a muchos kilómetros de distancia. Después, salió al balcón para mostrar los dos metales cosechados en Brisbane, el oro del relevo mixto 4x100 libres, con récord del mundo incluido, y el bronce de los 50 braza.

El primer edil le hizo entrega de un ramo de flores y de una placa compartida con su entrenador en el Down Toledo, Alberto Salazar, un pilar importantísimo en los éxitos de la nadadora. Arribas recordó que Agudo «ya forma parte del elenco de personalidades que han hecho que Yepes sea reconocido no solo por su historia o sus monumentos». Asimismo, aseguró  que, «para nosotros, ha sido otro sueño verte luchar por las medallas que te hacen grande como deportista y también como persona».

Yepes agasaja a su campeona - Foto: J. M. LoechesSin embargo, el momento más emotivo llegó con la lectura de unos versos escritos por el abuelo de Iris, Antonio Agudo, a los que puso voz María Luisa Mora, vecina del municipio con varios premios de poesía. Arrancó muchas lágrimas y a otros les dejó con un nudo en la garganta.

Casi como le pasó a la nadadora al coger el micrófono y devolver todo el cariño recibido. «Me dirijo a vosotros por todo el apoyo que me habéis dado en este campeonato; me habéis dado mucha fuerza para conseguir las medallas que hoy os traigo aquí», aseguro. Además, contó que su estancia en tierras oceánicas fue «magnífica» y que el campeonato «ha sido muy duro; me levantaba a las 6 de la mañana para empezar a las 9 la competición». Finalmente, con mucha emoción, confesó que «supuso mucho esfuerzo», pero también que «ha merecido la pena».

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