La XIV edición de la Feria del Libro de Toledo, que tendrá lugar entre los días 11 y 19 de mayo, se dispone a dar sus primeros pasos con la vista puesta en los lectores más jóvenes. Concretamente, entre quienes se encuentran en la franja comprendida entre los 15 y los 25 años. El «relevo generacional» -apuntó ayer Elvira Rivero, directiva de la Asociación de Libreros- preocupa tanto como en su momento preocuparon los efectos de la crisis o la llegada de los soportes electrónicos.
En este sentido, la Biblioteca de Castilla-La Mancha, invitada por los organizadores de la XIV Feria del Libro para pronunciar el pregón inaugural, ha decidido poner este acto en manos de uno de sus clubes de lectura más jóvenes, formado por adolescentes. «La idea es que los lectores jóvenes tengan visibilidad dentro de esta sociedad».
La XIVFeria del Libro de Toledo, cuyo lema en 2019 es «Nuestro pequeño Retiro», fue ayer presentada en el Ayuntamiento por la concejal de Cultura, Nuria Cogolludo, y por representantes de los Libreros y de la Federación Empresarial Toledana, ya que en ella toman parte una veintena de empresas colaboradoras. «Desde Fedeto pensamos que los libros son un instrumento fundamental para la cultura, así que animamos a los ciudadanos a que participen», señaló Ernesto García.
Cogolludo, quien manifestó que medio centenar de actividades han sido programadas, agradeció su esfuerzo a Elvira Rivero y al resto de los libreros y recordó que las citas con el mundo del libro comenzarán durante la jornada anterior al pregón con ‘La Senda del Cuento’, una cita con la narrativa oral que será celebrada en el espacio Matadero Lab y que congregará allí a Antonio Rubio y Javier Caboblanco (a las 18,00), y también, solo para adultos, a Simón Negrín (21,00).
Otra de las novedades de esta edición, en la que las casetas volverán a ser instaladas en Zocodover, con un nuevo diseño para poder aprovechar más aún el espacio central y que los expositores cobren por lo tanto una mayor relevancia dentro de la plaza, será el décimo aniversario de Descrito Ediciones. «Es una editorial pequeña que ha ido creciendo sin perder calidad en sus ediciones», según la directiva de la Asociación de Libreros. En comparación, es mucho más joven Mochuelo Ediciones, que cuenta con solamente un año de experiencia.
Una actividad en torno a la lectura de novela romántica (en cuya elaboración han participado el Círculo de Arte y Masa Madre), poesía, radioteatro y el ya tradicional vermú de despedida ofrecido por las firmas Lastura y Juglar.