Todo hace indicar que el retorno de la Nocturna de Toledo, el próximo 16 de octubre, será por todo lo alto. Se va a rozar el cartel de ‘no hay dorsales’ a tenor del buen ritmo que se lleva en estos momentos. Tras aumentar el precio a 16 euros, se han superado ya los 2.500 participantes, una cifra que, sin duda, colma las expectativas de sus organizadores.

Así lo reconoce Rubén Lozano, para quien poder llegar al tope de los 4.000 «era un objetivo prácticamente impesable, aunque también deseado». Y es que, parece que la gente tiene muchas ganas de correr después de muchos meses de restricciones y pocas pruebas atléticas en las calles de Toledo y los municipios de la provincia.

Como siempre, habrá muchas sorpresas que no se desvelarán hasta última hora, como la participación de varios atletas de prestigio.

De momento, sí que se sabe que los corredores podrán elegir el circuito de 8 kilómetros, con salida en el puente de Azarquiel, o el de 5, con inicio en la plaza de toros. La meta común quedará instalada en la plaza de Zocodover. Eso sí, se prevén varias salidas en tandas de 500 atletas, sobre todo en la distancia más larga. Todos tendrán que arrancar con la mascarilla puesta.

Será la edición decimocuarta y se espera un guiño especial por el octavo centenario de Alfonso X El Sabio, asi que la calle que lleva su nombre estará incluida en el recorrido, y contará con alguna seña especial, además del logotipo, que está presente en la camiseta. Por lo demás, tampoco faltará la habitual animación en diferentes puntos del recorrido, para motivar a los corredores a su paso.

Por lo demás, la prueba mantiene su vocación solidaria, así que se volverá a colaborar con la Fundación Niemann Pick. Banco Santander sigue siendo el impulsor de la carrera, entre otros colaboradores.