Felipe Jurado Puñal, hermano mayor de la Ilustre Hermandad de Caballeros y Damas Mozárabes, falleció el pasado viernes en Toledo tras una larga enfermedad. Encabezaba el Capítulo desde el 22 de febrero de 2014, cuando se convirtió en hermano mayor después de muchos años implicado en la directiva como teniente. 

Pese a permanecer nada más que cinco años al frente de los mozárabes toledanos -poco tiempo en comparación con los 17 de José Miranda, entre 1983 y 2000-, Jurado consiguió hacer realidad la vieja aspiración de reabrir la iglesia de San Lucas, que permanecía cerrada al público y con la cubierta en malas condiciones. En 2004 no tuvo inconveniente en denunciar en este periódico la situación por la que atravesaba el templo, pese a la intervención realizada algunos años atrás por la Escuela Taller municipal. Sería a finales de mayo de 2016, gracias a la intervención del Consorcio de la Ciudad de Toledo, cuando San Lucas recuperó su esplendor, sumándose desde entonces -el templo y su jardín, junto con su nuevo espacio polivalente- a la oferta cultural de la ciudad. 

La fotografía superior le muestra, precisamente, durante la ceremonia que ofició en el interior del templo el arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez Plaza, en presencia de la alcaldesa Milagros Tolón. Ella recibiría del Capítulo poco después, en agosto de 2016, el collar mozárabe reservado a los regidores toledanos.

El año 2016 fue, en general, bastante intenso para toda la directiva, ya que se cumplieron cincuenta años desde la reinstitución del Capítulo en 1966. Felipe Jurado participó entonces en numerosos actos, conferencias y celebraciones.

El hermano mayor de los Mozárabes fue, además, un reconocido vecino de Santa María de Benquerencia, barrio en cuya actividad social y religiosa participaba. Allí encabezó la Junta Local del Partido Popular hasta 2007, año en que fue sucedido por Manuel Rábalo.