Sin Bélgica el Corpus de Toledo no sería lo mismo. Año tras año y solo durante unas horas se cuelga la colección de tapices flamencos de la Catedral para engalanar más la ciudad al paso de la Custodia. El embajador belga, que estuvo siguiendo la procesión desde los balcones de la Delegación, lo sabía. «Aquí en Toledo hay una gran colección», comentó «es el único sitio en el mundo que se expone al exterior, porque normalmente son muy valiosos». «Nunca se expone un tapiz en el exterior, solo en Toledo se hace esto», añadió.

Marc Calcoen conocía de primera mano los tapices, porque contó que en visitas anteriores a Toledo había ido a verlos en el museo que hay específico. «Todos los tapices que hay en las grandes catedrales de España son flamencos», explicó, «todos vienen de Flandes porque hasta 1.700 los reyes de España, los grandes de España, la nobleza, los obispos compraron muchísimos tapices en nuestras regiones, era el gran artículo de exportación de mi país en esta época».

El embajador belga dijo que le había llamado mucho la atención que «la ciudad huele muy bien», por el tomillo. «Normalmente las ciudades huelen a gasolina y esas cosas», bromeó. Dijo que en Bélgica no se celebra tanto el Corpus, pero sí Pentecostés.

"Solo en Toledo se cuelgan tapices flamencos al aire"

En Letonia, con una tercera parte de católicos, tampoco hacen procesiones del Corpus. Su embajadora, Argita Daudze comprobó que la «gente que participa en las procesiones son muy serios, puedo sentir que es de corazón, que es de verdad, que es una cosa que significa para la gente».

Hubo también representación diplomática de Malta, con el embajador Vanny Xuereb y de Eslovenia, con la consejera de la Embajada, Tina Grgantov.