El Grupo Municipal Vox volvió ayer a ser la voz disonante en el apoyo y la protección a las mujeres víctimas de violencia de género que el Grupo Socialista llevó en forma de proposición. Como ya ocurriera esta semana en el Congreso de los Diputados, los concejales de la formación de Abascal mostraron su desacuerdo con la moción socialista, que buscaba la adhesión del Ayuntamiento de  Talavera al Proyecto de Ley de medidas urgentes en materia de protección y atención a las víctimas de violencia de género.

Tras un agrio debate que volvió a enfrentar a los portavoces de Vox, David Moreno, con la del equipo de Gobierno, Flora Bellón, la moción se aprobó con la unanimidad de los presentes, también de Vox, por un error que llevó a sus tres ediles a levantar la mano a favor, aunque su postura fuera la contraria.

En su intervención, Moreno presentó primero una enmienda transaccional que fue rechazada con un rotunda negativa de Bellón. En ella, solicitaban que la protección a las mujeres que sufren la violencia machista se haga extensiva a todas las víctimas de violencia doméstica, «sin distinción alguna de sexo, edad ni condición». Asimismo, reclamaban transparencia a la Junta para que detalle las partidas presupuestarias destinadas a las entidades que trabajan contra esta lacra «y qué porcentaje exacto» les llega realmente a las víctimas, y endurecer las penas de prisión para asesinos y violadores. Además, como cuarto y último punto, presentaron una propuesta de declaración institucional que prestaban a la Corporación para hacerla suya donde hablaban de una violencia «sin distinción».

Tras la negativa de la bancada socialista, se inició un debate que ya se ha repetido en varias ocasiones en el Salón de Plenos cuando se trata este tema. La portavoz socialista argumentó con datos evidentes, que la de género es una violencia que se ejerce contra mujeres y niñas «por el mero hecho de serlo», y les recriminó su «absoluto negacionismo y el mirar hacia otro lado. Crean conceptos para tergiversar algo que es una evidencia y un fenómeno grave».

Bellón le recordó que aunque insistan en ello, «hay una diferencia abismal» entre los casos de violencia de género con respecto a la doméstica, aunque ya le digo que las que sufren violencia doméstica, la mayoría son también mujeres». Con los datos estadísticos de 2019 sobre la mesa, 168.000 casos de violencia de género por 15.000 de violencia doméstica.

Con respecto a las partidas presupuestarias que la Junta destina a esta lucha, Bellón le contestó con cifras, pero con las de mujeres asesinadas: 1.081. «Esa no le interesa? Pues debería».

Bellón aseguró que desde el Ayuntamiento «vamos a seguir insistiendo en esto porque nos importa y es prioritario. Estamos a las puertas del 8-M, uno de cuyos objetivos es visibilizar la lucha de las mujeres para avanzar en igualdad, acabar con toda forma de discriminación y cuya forma más extrema es la violencia de género». Recordó además que durante la pandemia, uno de los colectivos más vulnerables siguen siendo estas víctimas.

Lejos de reconocerlo, el portavoz de Vox acusó a los socialistas de «hacer política con las mujeres, porque votan en contra de proteger a todas las víctimas, y todas las personas son dignas de la misma protección» e insistió en que en su partido «condena cualquier violencia, ustedes no».

En cuanto a la ausencia de una declaración institucional, por la negativa reiterada de Vox, Moreno indicó que «no hemos firmado otras declaraciones, porque las han traído sin debatir ni consensuar, y porque criminalizaban al hombre por el mero hecho de ser hombre».

El segundo turno de intervención recrudeció el enfrentamiento, asegurando el representante de Vox que ellos sí defendían a las mujeres, y que lo hacían «desde antes de nacer, porque nosotros defendemos la vida desde la concepción hasta la muerte, ustedes están en la muerte, con el aborto y la eutanasia».

Lejos de callarse, Bellón insistió en su posición: «No estamos para egocentrismos machistas de los señores concejales de Vox, sino para apoyar cualquier iniciativa que suponga un avance para la sociedad», algo que molestó enormemente a Moreno, que pedía el turno de palabra para contestar. «No tengamos la piel tan fina», le espetó la alcaldesa, «usted nos ha dicho que estamos en la muerte, y  no les hemos dicho nada».

Al final de la moción llegó el punto anecdótico de la jornada. Bellón lanzó un órdago a los representantes de Vox de realizar una declaración institucional de urgencia y firmarla. Tras su aceptación por parte de todos los portavoces, y antes del receso para acordar el texto, la alcaldesa pidió el voto para la moción socialista que, para sorpresa de todos, contó con el apoyo de los tres representantes de Vox, quienes pensaban que votaban el receso y no la proposición.

La vuelta del parón, que no sirvió para nada porque finalmente Vox no quiso firmar, empezó con la petición del turno de palabra por parte de Moreno para aclarar la «confusión» y pedir cambiar el sentido de voto. «Se ha acabado el punto anterior, ya le hemos votado», dijo García Élez, quien lo volvió a aclarar en el ruego de Moreno. «No son los primeros que se equivocan ni serán los últimos, no se puede cambiar el sentido del voto. Estúdiese el reglamento del Pleno», finalizó.