El alcalde de Talavera fue el primero en tomar la palabra y volvió a insistir en que el agua debe sacarse fuera de la «batalla electoralista» más aún en periodo preelectoral. En su intervención, Jaime Ramos apeló a la «misma unidad y vía de entendimiento» mantenida en el Ayuntamiento talaverano en defensa del agua, porque es lo mejor no sólo para la ciudad sino para el conjunto de la región, indicando que «vamos a seguir igual y es mejor estar unidos que hacer la guerra por separado».

Por eso, resaltó que en el Consistorio «hemos dado un ejemplo de unidad porque todos los grupos políticos hemos ido de la mano en la defensa del agua» recordando que para algunos «habrá sido más cómodo que para otros pero lo hemos hecho porque ha sido nuestro deber, ya que Talavera y su futuro deben estar por encima de cualquier otra consideración».

Por su parte, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, explicó que si se convierte en presidente de la Junta pondrá en marcha una mesa de trabajo en la que estén representados todos los actores con intereses en materia de agua para que este elemento sea un motor económico para la región.