Ana Nodal de Arce

Me la juego

Ana Nodal de Arce


Tolonismo por el mundo

18/03/2021

A ella no le importa Murcia. Ni Madrid. Ni siquiera Castilla-La Mancha. Milagros Tolón se ha convertido en un icono reconocido allende nuestras fronteras. Mientras aquí la situación política es un sinvivir, la alcaldesa anuncia una buena nueva que nos deja boquiabiertos: es una alcaldesa campeona. Y lo certifica la OCDE, esa organización para la cooperación y el desarrollo económico de entidad mundial tan importante. Vamos, que la regidora de París, Anne Hidalgo, presidenta del grupo selecto de líderes municipales, le ha invitado a formar parte de esta iniciativa llamada a luchar contra la desigualdad y promover un crecimiento económico más inclusivo. ¿Que no entienden nada? Da lo mismo.
De momento Tolón está en todas las salsas: es vicepresidenta segunda de la Federación de Municipios y Provincias de España, ha sido nombrada representante en el Foro Local para la Agenda Urbana de esa institución, forma parte del comité federal del PSOE que preside su amigo Sánchez y tanta confianza ha depositado en ella que será una de las organizadoras del próximo Congreso Federal, junto a Adriana Lastra, entre otras figuras del socialismo español. Lo ha anunciado Ábalos. Tantos cargos acumula Tolón, que si cobra dietas por asistencia a cada reunión, debe estar forrada la mujer. Pero hay que ver lo que trabaja. Eso lo saben los tolonistas, que gozan con cada uno de los logros de su lideresa como si fueran suyos. Bueno, más. Es de bien nacidos ser agradecidos.
Eso sí, hay un inconveniente: tal vez acaparar tanto protagonismo insulso le está haciendo olvidarse de lo cercano: hace más de dos meses que el temporal Filomena arrasó Toledo y la Vega sigue inaccesible. También el Parque Escolar, por no hablar de otros barrios de la ciudad por los que no paso a diario, pero que compruebo, a través de imágenes de los vecinos, que no están en su mejor momento. Y eso que llega la primavera. Tampoco se muestran impecables los pasos de peatones, hay que bajarse de vez en cuando del coche oficial, alcaldesa, ni las calles lucen como los chorros del oro. Y eso que tenemos una escoba de platino, otro asunto que nos deberían explicar, porque la limpieza brilla por su ausencia.
La alcaldesa campeona, según la OCED, se puede dar un paseo por París, pero debería recorrer la ciudad donde manda, porque vería que la desidia se ha apoderado de sus calles, de sus barrios, de sus zonas verdes. La participación vecinal no existe y el equipo de Tolón, muy cohesionado, se une para denunciar asuntos de la época de Page, pero no aclara líos de la era Tolón con multas incluidas. ¿Transparencia, para qué? Ahora resulta que gracias a La Tribuna de Toledo, bendito sea este periódico y sus profesionales, nos hemos enterado de que la alcaldesa, la Junta y el ministerio de Cultura traman dar una salida definitiva a la Vega Baja. Yo, ante este contubernio a espaldas de los grupos de la oposición y de los toledanos, tiemblo. Esa solución final me causa desconfianza, tal vez porque aquello que se oculta levanta sospechas. Estoy por irme a la Catedral y rezar a nuestro patrón, San Ildefonso, para que de esta triple alianza no salga nada lesivo para los intereses y el patrimonio de nuestra maravillosa ciudad. Porque Milagros Tolón es una alcaldesa campeona. Pero a saber de qué.