1.800 jóvenes y 700 mayores en los proyectos de Cruz Roja

Mario G. Gutiérrez
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Desde la organización humanitaria realizan diferentes programas de intervención social, empleo, salud, juventud o voluntariado y participación para ayudar al tejido social talaverano

1.800 jóvenes y 700 mayores en los proyectos de Cruz Roja - Foto: Álex Casas

La Asamblea de Cruz Roja en Talavera lleva a cabo diferentes proyectos para dar asistencia a multitud de realidades sociales que conviven en la ciudad, siendo los jóvenes y los más mayores los que copan parte de las acciones que toman forma desde la entidad. Desde la organización, realizan programas no solo de juventud, con más de 1.800 jóvenes en el primer semestre del año, sino también de intervención social, empleo, salud, voluntariado y participación, entre otros, según ha indicado a este diario la coordinadora de la oficina local, Maleni Palomo.

El de Infancia Hospitalizada es uno de ellos. Adolescentes y niños se benefician de este programa cuyo objetivo es acompañar al pequeño en su estancia además de poder dar un respiro a los padres o familiares. Se pretende lograr un ambiente más agradable y amenizar su ocio y tiempo libre desarrollando actividades relacionadas con este campo, como son juegos, canciones, manualidades o teatros.

El proyecto de Educación para la Salud gira principalmente en  torno al desarrollo de talleres informativo-formativos con grupos de adolescentes y jóvenes de 14 a 20 años, en las que se promueven y refuerzan hábitos de vida saludables en general y, especialmente, aquellos asociados a su alimentación, su salud sexual y su conducta ante posibles procesos adictivos, potenciando la salud integral de la juventud. 

Así mismo, se desarrollan acciones de sensibilización con motivo de la celebración de los días conmemorativos -mundiales o internacionales- o dirigidas a la promoción de hábitos saludables, como pueden ser  la práctica de ejercicio físico o el ocio saludable; siempre relacionados con las temáticas abordadas en el marco del programa. El Día Mundial de respuesta ante el VIH y el Sida, el Día Mundial de la Alimentación o una jornada deportiva,  pueden ser ejemplo de ello.

Los contenidos abordados en los talleres informativos- formativos, se dividen en tres módulos: alimentación, salud sexual y drogas.

En el módulo que versa sobre alimentación, se tratan aspectos generales: salud, nutrición, necesidades nutricionales y rueda de alimentos. Además se canalizan y se abordan temas como los prejuicios, estereotipos y mitos en torno a la alimentación y cánones sociales de belleza, trastornos de la conducta alimentaria, habilidades individuales y sociales, como la autoestima o la capacidad de analítica y crítica, autonomía en la toma de decisiones, resistencia a la presión grupal, empatía y asertividad.

En el ámbito de la salud sexual, se orienta todo a la sexualidad, embarazos no planificados, infecciones de transmisión sexual, VIH y Sida, vías de transmisión, prevención de la infección y detección de la misma por VIH, y su incidencia en el mundo.

En el último de estos bloques, el de drogas, se pretende concienciar de los tipos de drogas existentes así como los daños que ocasionan su uso, abuso y dependencia, incidiendo además en la tolerancia y reducción de riesgos. Ante todo ello, es necesario tener en cuenta los prejuicios, estereotipos y mitos en torno a la droga. 

Mayores. Además de estos talleres con jóvenes, destaca la labor que Cruz Roja lleva a cabo con los mayores, con la participación de más de 700 entre enero y junio, donde el objetivo general que busca Cruz Roja es que este colectivo pueda permanecer el máximo tiempo posible en su domicilio, con todos los beneficios que esto conlleva; se encuentran en su entorno habitual en el que desarrollan sus rutinas diarias de una forma independiente. 

Cuando esta independencia se ve afectada, desde Cruz Roja se trabaja para que estas personas puedan seguir siendo autónomas. Esta autonomía se puede conseguir dándoles pautas de actuación frente a una caída, enseñándoles a llevar una dieta saludable para prevenir enfermedades como la hipertensión, el colesterol o la diabetes, dotándoles de productos de apoyo para promover su movilidad o la autogestión de su medicación, por ejemplo.

A lo largo de todo el año, se realizan talleres de gimnasia, memoria y manualidades, con el fin de enlentecer el deterioro físico y cognitivo asociado a la edad y fomentar las relaciones sociales entre las personas que acuden a los talleres.

Para las personas que ya no pueden acudir, los voluntarios de la organización se desplazan al domicilio de estas personas para realizar una visita, que puede ser simplemente de compañía, dando un paseo o acercándoles la lectura, llevándoles un libro de la biblioteca y leyéndoselo si fuera necesario.

Todo ello se complementa con actividades de estimulación cognitiva, gimnasia en sala, alfabetización digital o programas de acompañamiento, en el domicilio, donde se podrán realizar diversas actividades de lectura, llevarles libros desde la Biblioteca Municipal José Hierro, realización de pasatiempos, hacer actividades para mejorar la memoria de la persona mayor, conversar o simplemente ofrecer momentos de respiro al familiar cuidador; fuera del domicilio, a dar un paseo, acompañarles al médico, trámites administrativos o de otra índole que necesite una persona mayor o incluso acompañamiento telefónico, que consistirá en llamadas de seguimiento a las personas mayores para ver cómo se encuentran.