La concejala de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Talavera, Flora Bellón, ha informado de que la Policía Local de Talavera ha interpuesto un total de 27 denuncias este fin de semana, de las que la mayoría, un total de 24, han sido por incumplir diferentes medidas antiCovid.

En nota de prensa, ha detallado que las sanciones han sido 21 por saltarse el toque de queda o no llevar la mascarilla puesta, dos a locales que estaban abiertos fuera del horario permitido (teniendo en cuenta que ahora está establecido a las 21,00 horas, una antes de que comience la restricción de la movilidad), una por consumo de alcohol en la vía pública y varias atenciones a llamadas por molestias por ruidos en domicilios particulares.

Se trata de un número inferior a los  registrados en fines de semana anteriores, aunque siguen siendo muchas teniendo en cuenta la realidad sanitaria que vive el país y todo el mundo por la pandemia del Covid y con las cifras de contagios y hospitalizados que sufre Talavera. Estos números han bajado de forma considerable en los últimos días, pero siguen siendo elevados con respecto a los datos provinciales y regionales.

el mejor complemento. La también portavoz municipal  ha pedido a la ciudadanía que, con nuestra responsabilidad individual, seamos «el mejor complemento» de la labor que desarrollan, cada día y desde primera línea de batalla, los profesionales sanitarios. En este sentido, ha reiterado que hay que «seguir observando las recomendaciones y cumpliendo esas restricciones» por parte la Dirección General de Salud Pública.

Esa sigue siendo, ha continuado, la mejor manera de que «contribuyamos a que sigan disminuyendo los casos de contagios, que las medidas se puedan ir flexibilizando y con las garantías de que, poco a poco, podamos ir recobrando la tan ansiada normalidad».

Del mismo modo, Bellón ha añadido que es fundamental que todos «rememos en la misma dirección y no nos relajemos», ya que, «si cada vez que se flexibilizan las medidas, nos relajamos, nos va a llevar a retroceder con los graves perjuicios sanitarios, sociales y económicos con los que sabemos que termina repercutiendo en la ciudad».