La Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) del Ayuntamiento de Toledo va celebrar el Día Mundial de los Derechos del Consumidor (15 de marzo) yendo a los centros de mayores (11 de marzo en Santa Bárbara, día 12 en el Polígono y día 16 en San Antón) para ofrecer charlas sobre la venta a domicilio y todas las medidas de prevención que deben adoptarse cuando se compran productos o servicios a estos comerciales. Se tata de poner en guardia contra los «engaños fraudulentos», indica Ana Abellán, concejal de Servicios Sociales, Igualdad, Mayores y Personas con Discapacidad.

Por lo que dice Ana Isabel de la Fuente, técnico de la OMIC, este tipo de venta ambulante poco menos que roza lo delictivo: son personas que llegan a las casas «haciéndose pasar por empleados públicos o sanitarios», que para reforzar esa impresión y «dar mayor credibilidad van vestidos con batas blancas» y que hacen ver a los mayores «que si compran ese producto», por ejemplo máquinas presuntamente saludables, «van a mejorar su salud». Además, «suelen ser financiaciones de un importe bastante elevado» (mil o dos mil euros) pero estos vendedores a domicilio ocultan el precio total y en su lugar ofertan «una cuota muy reducida».

Se han editado unos folletos con consejos de la OMIC para evitar problemas: que la persona que viene a vender se identifique, no firmar nada (si lo hacen que tienen 14 días para desistir o doce meses si no les informan de este punto), no enseñar documentos de los que puedan copiar datos personales porque «suelen darles de alta en contratos fraudulentos» y que no paguen en efectivo.