La ciudad de Toledo lidera los ingresos según la actividad económica generada por las empresas domiciliadas en su término municipal. Las más de mil sociedades (1.167) radicadas en la capital regional ingresaron a lo largo de 2017 alrededor de 1.717 millones de euros en facturas. La cifra es superior a lo facturado por las empresas que operan con sede en Talavera, la segunda ciudad de la provincia y tradicional bastión industrial y agropecuario. En la ciudad de la cerámica se facturaron 950 millones de euros procedentes del negocio de casi 900 sociedades. En el caso de Illescas, tercer núcleo de la provincia por población y enclave emergente en las últimas décadas por su proximidad a la Comunidad de Madrid, se registraron ingresos por valor de 607 millones que surgieron de 371 firmas operativas. La suma de las cuantías de Talavera e Illescas es inferior al total de Toledo.
Estos datos se ofrecen en un estudio de distribución de la facturación de las sociedades por municipio elaborado por Informa, empresa suministradora de información económica. El informe, publicado este verano y con datos relativos al año 2017, solo incorpora a aquellas empresas que hayan tenido ingresos a lo largo del ejercicio. En el caso de la provincia de Toledo, una decena de localidades forma parte del análisis elaborado por la consultora. La lista incluye a las cinco principales localidades según el censo de población, Toledo, Talavera, Illescas, Seseña y Torrijos, y otros municipios de menor tamaño pero notable actividad económica, como Casarrubios del Monte, Mora, Noblejas, Quintanar de la Orden y Olías del Rey.
El dato registrado en la ciudad de Toledo refleja la fortaleza del tejido empresarial en la capital regional y ubica a la capital castellano-manchega como el principal polo de dinamismo económico en el conjunto de Castilla-La Mancha. El millar largo de empresas que ejercen desde este punto geográfico central en la península forman una tupida red que explica, entre otras circunstancias propias de la economía local, la menor incidencia con que la crisis golpeó y el paro comparativamente menor que lleva registrando desde los máximos de 2014. El grueso de las empresas se dedica al sector terciario y oferta actividades centradas en ámbitos como administración, comercio, logística o enseñanza. La condición capitalina de la ciudad y su progresivo aumento de población explica la importancia de la prestación de servicios. Las estadísticas de actividades económicas municipales en el ámbito geográfico de Castilla-La Mancha, disponibles en el portal web de transparencia de la administración autonómica, certifican la primacía de Toledo en el ámbito comercial, tanto minorista como mayorista. Asimismo, la ciudad mantiene una notable presencia de industria manufacturera.
Talavera es la segunda localidad de la provincia con más facturación empresarial. La crisis económica que comenzó la pasada década redujo el músculo de la antaño primera ciudad por población y bastión industrial en la provincia. En la comparación con Toledo cabe tanto reseñar su menor red empresarial activa, con apenas 893 empresas activas, y la menor facturación media de las mismas. Así, mientras que en la capital regional cada sociedad vendió de media más de 1,47 millones en el ejercicio, en Talavera el promedio se redujo hasta los 1,06 millones.
Las ventas de las 371 sociedades instaladas en Illescas ascienden a 607 millones de euros. La fortaleza empresarial de la cabecera sagreña viene también determinada por la elevada facturación media de sus empresas, una cantidad que roza los 1,64 millones. La presencia de grandes compañías aeronáuticas eleva los ingresos en la localidad más populosa del norte de la provincia.
Toledo es la ciudad número 123 en España por el total de facturación de las empresas que tienen su sede en la ciudad. Talavera ocupa la posición 204 e Illescas la 325.
GRANDES VÍAS.
El caso de Casarrubios del Monte es uno de los más singulares dentro de la provincia. La conjunción de compañías transformadoras en ámbitos como el metal o la química, su condición de nudo logístico por su cercanía con la autovía A-5, y la presencia de amplios espacios industriales en el término municipal, dejan a este municipio de poco más de 5.000 habitantes como el cuarto de la provincia según la facturación de sus sociedades (555 millones).
Noblejas, por su parte, cuenta un extraordinario aporte procedente de una empresa de transformación láctea que trabaja en la elaboración de yogures para una de las grandes distribuidoras de alimentación en España. Sus apenas 53 sociedades activas generaron una ventas de más de 381 millones, por delante de la cuantía acumulada por Quintanar de la Orden (293 millones), Seseña (257), Olías del Rey (229) y Torrijos (187), todas ellas localidades más pobladas.
La radiografía empresarial en la provincia evidencia la importancia de la capital y su fuerte tejido productivo, además de ratificar el aporte fundamental que tienen las vías terrestres de alta capacidad para el desarrollo económico. El paso de las grandes carreteras que transitan por la provincia, especialmente aquellas que parte desde Madrid como la A-4, la A-42 o la A-5, beneficia la instalación y el mantenimiento de la actividad societaria.
Un total de 7.808 empresas activas facturaron algo más de 10.428 millones de euros en 2017. Según las ventas totales registradas en el conjunto de la provincia, Toledo se sitúa como la 29 entre las 50 españolas. Dentro de la región, le siguen Ciudad Real (7.377 millones), Albacete (6.802), Guadalajara (4.266) y Cuenca (3.371). Los ingresos de Toledo superan la suma de Albacete y Cuenca.