A solo unos días de que arranque el juicio al procés, el líder del PSC, Miquel Iceta, tiene claro que las condenas acarrearán iniciativas políticas de calado en Cataluña, incluido un posible adelanto electoral. «Habrá que ver cómo reacciona el independentismo a la sentencia, y si lo hace dividiéndose aún más o rehaciendo su unidad perdida».

En el aforismo jurídico Summum ius, summa iniuria se señala que la ley aplicada hasta el más mínimo detalle puede generar la mayor de las injusticias. ¿Está de acuerdo?

Las leyes son las reglas del juego y la máxima garantía de los derechos de todos, nos igualan y nos dan las mismas oportunidades. Quienes garantizan el cumplimiento de las leyes son los jueces, que deben velar contra toda injusticia.

Se lo digo más que nada por las horas que Turull estuvo fuera de la prisión para estar con su hijo en el hospital la Noche de Reyes.

La Justicia no está reñida con la humanidad. 

Se lo digo también por una prisión preventiva de más de un año. 

Nosotros ya hemos manifestado en diversas ocasiones que nos parece una medida desproporcionada. 

Sobre este punto, ¿cree que la Justicia es igual para todos? Pienso en Urdangarín, la Pantoja, Rato... 

Más de un año en prisión a la espera de juicio se hace difícil de comprender. Podría haberse asegurado la presencia en el juicio de los dirigentes encausados de alguna otra manera. A pesar de que algunas decisiones judiciales hayan sido muy discutidas, en general, la Justicia española ejerce sus funciones de forma adecuada.

¿Le hizo daño a Junqueras y compañía que Puigdemont se fugara?

Estoy convencido de ello. Así lo han manifestado diversos abogados defensores.

¿Si Junqueras hubiera salido antes del 21-D, todo hubiera cambiado?

Es evidente que sin prisión preventiva el debate ahora sería otro. Ahora la causa independentista está centrada en pedir la libertad de sus líderes y que estos sean exonerados de sus penas y así evitar tener que explicar por qué lo que hicieron fue un desastre y un auténtico fracaso que ha generado frustración y una profunda división entre la ciudadanía de Cataluña.

¿Es el líder de ERC el interlocutor más deseable para el Gobierno de Pedro Sánchez? 

Las fuerzas políticas eligen libremente a sus representantes, aunque lo deseable es que todos los interlocutores gocen de la plenitud de sus derechos y puedan ejercer su labor sin ningún tipo de cortapisa. Difícilmente pueden ejercer el liderazgo quienes no gozan de libertad o tienen cuentas pendientes con la Justicia.

¿Qué opina de la guerra de las plantas de Navidad de la minicumbre Gobierno-Govern?

Es la batalla de la imagen, el lenguaje de los símbolos. Siempre que se producen grandes encuentros, cumbres delicadas, hay que cuidar hasta el último detalle.

¿Y de Arrimadas agitando la bandera de España en el estrado -como la Libertad guiando al pueblo- o mostrando cartulinas con el 155...? 

Hay que reconocer que en Ciudadanos son muy hábiles en el manejo de la imagen pública. Saben cómo salir en la foto, lo vemos en cada Pleno. Pero el Parlament no es un plató de televisión, aquí venimos a controlar al Govern y a hacer propuestas, no a ver quién llama más la atención. Hay partidos nacidos del conflicto o que se alimentan del conflicto. Es difícil que esos mismos partidos se empeñen en rebajar la tensión. Pero deberían intentarlo.

¿Con los millones que en teoría va a llevar Sánchez a Cataluña se soluciona parte del problema? Parece que tiende la mano el presidente y la Generalitat se la muerde.

Con sus Presupuestos, el presidente Pedro Sánchez propone un trato justo, un nivel de inversión pública adecuado para Cataluña. No se trata de favorecer a los independentistas, consiste en tratar con equidad a los ciudadanos de Cataluña.

¿Le llamó Valls o Arrimadas para que se uniera a su plataforma? Él es tan socialista como ustedes y se ganan más asientos.

El PSC se presentará a las municipales con su marca, su programa y su candidato. Somos fundamentalmente un partido municipalista con presencia en más de 170 Gobiernos locales. Los experimentos no van con nosotros. Valls es un adversario al que respetamos pero creemos que se presenta bajo unas siglas equivocadas.

¿Teme usted que muchos de los que han acudido a las manifestaciones españolistas vayan a pasarse a Vox en los próximos comicios catalanes?

El PP y Ciudadanos han allanado el camino a Vox con sus propuestas cada vez más conservadoras. Es un hecho que ante el original y la copia, la gente se queda con el original, así que populares y Cs deberían intentar volver al centro en lugar de competir por ver quién formula las propuestas más reaccionarias. El fenómeno de Vox ha venido para quedarse. Dan respuestas sencillas y rápidas a problemas muy complejos, como, por ejemplo, la inmigración. Hay que luchar con argumentos para analizar fenómenos complejos y no avalar fórmulas mágicas pero que son falsas soluciones. En Cataluña ya tuvimos Plataforma per Catalunya, un partido claramente xenófobo que consiguió concejales en ayuntamientos importantes. Hay opciones reales de que Vox entre en el Parlament.

¿Está Vox tan a la derecha como Podemos a la izquierda? 

Vox está en la extrema derecha, propugna cambiar las leyes y volver 40 años atrás en derechos sociales, reconocimiento de la diversidad y respeto a las minorías. No hay comparación.

¿Se podría repetir el caso andaluz incluyendo al PSC en la ecuación? Mejor eso que gobiernen los independentistas, ¿no?  

Nunca pondremos en manos de un partido como Vox la llave de las instituciones. En Andalucía quien necesitaba a Vox era el PP, que no han dudado en darle entrada en las instituciones con tal de desalojar al PSOE. Ciudadanos podía haberse limitado a votar la investidura de Moreno Bonilla, pero decidió entrar en la Junta aceptando pagar el precio de darle la llave a Vox. Del mismo modo, Cs obtuvo la Presidencia del Parlamento andaluz contando con los votos de Vox. En muchos países de Europa en los que la extrema derecha tiene representación se ensayan diversas fórmulas para evitar que tengan la llave de las instituciones.

Casado pide el 155, Rivera el 155 y el exministro Margallo dice que lo que se aplicó fue el 0,155.

El artículo 155 de la Constitución sirve para lo que sirve, para restablecer la legalidad cuando ha sido quebrantada, y para nada más. No es una especie de vacuna que hace desaparecer los problemas. No es un artículo para derrotar a los independentistas como pretenden algunos. Un 155 in eternum aquí no va a solucionar nada. ¿Qué hacemos con los dos millones de personas que creen que la solución para Cataluña es la independencia? El reto es decirles que no, que se puede seguir juntos pero mejor, que España puede estar unida en la diversidad, y que quiere y respeta a Cataluña como es. Eso es hacer política, que es mucho más difícil que aplicar un artículo y olvidarse. 

Celaá asegura que sería inconstitucional aplicar el 155 porque no han cometido delito. ¿Alentar a la rebelión no lo es o hay que esperar a otra DUI o que una multitud eche abajo las puertas de las cárceles? 

Solo hay que leer la Constitución, que lo que dice es que el artículo 155 sirve para reestablecer la legalidad, el orden constitucional, que solo se vulnera con actos legislativos o de Gobierno, no con declaraciones. Objetivamente, estamos mejor que hace un año. Tenemos un Ejecutivo abiertamente independentista pero, a diferencia de cuando el PP estaba en el poder, en esta legislatura ni se ha convocado ni celebrado un referéndum ilegal ni el Parlament ha declarado unilateralmente la independencia. La aplicación indefinida del artículo 155 seria inconstitucional y nos alejaría definitivamente de una solución que solo podremos encontrar a través de un proceso de diálogo, negociación y pacto.