Sánchez-Garrido, el trigésimo noveno presidente

J. M. Loeches
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El nuevo regidor releva al anterior propietario Jorge Berlanga, que asumió la presidencia después de la dimisión de Juan Juárez en el mes de agosto, tras dos años en el cargo

Joaquín Sánchez-Garrido es el nuevo presidente del cuadro verde - Foto: David Pérez

Joaquín Sánchez-Garrido será el trigésimo noveno presidente en la historia del CD Toledo. Aterriza con una buena carta de presentación, como socio y miembro de la junta consultiva durante muchos años, y con el objetivo de renovar las ilusiones de una afición hastiada por los últimos fracasos.

Lo cierto es que ser toledano ayuda, y mucho, pero el abogado sucede a otros dos presidentes de la ciudad, Fernando Collado y Juan Juárez, aunque es verdad que Jorge Berlanga asumió la presidente después de la dimisión del segundo en el mes de agosto.

Juárez se quedó en la media aritmética que dice que una persona no aguanta más de dos años en el sillón presidencial. Sánchez-Garrido afronta el reto de igualar o superar a otros mandatarios icónicos que sí se han mantenido más tiempo, como hizo Collado durante seis campañas.

Llegó en 2012 y se marchó en mayoo de 2018. Esos años le colocaron a la altura de otros presidentes recordados como Martín Juanes, Emiliano Carballo y el desaparecido Manuel Torres Astilleros, también con seis años al mando de la entidad capitalina. Son los que más, porque por detrás se siguen quedando Eduardo Herrera, Emilio Gálvez y Ramón García Samaranch, que aguantaron cuatro campañas liderando el barco verde.

Y es que solo son capaces de mejorar la media de dos años como regidor Luis López Ortega, que dirigió el club entre 1956 y 1959; José Félix Ballesteros, entre 1976 y 1979; Francisco Barrientos, entre 1979 y 1982; y Juan José del Valle, entre 2009 y 2012.

Aunque el CD Toledo se fundó en el año 1928, la primera junta directiva se creó en 1940, concretamente el 1 de diciembre, justo antes de que arrancar a competir en la Primera Regional. José Ruiz Martín fue elegido presidente, con Felipe Vaquero Pérez en la vicepresidencia. Eso sí, el equipo aún conservaba el nombre de Educación y Descanso-Toledo.

Con la denominación actual de Club Deportivo Toledo, Federico Inglés fue quien ocupó por primera vez este cargo. Fue en 1942 y, curiosamente, José Ruiz Martín se encargó en esta etapa de la vicepresidencia.

En 1943, los verdes comenzaron una larga estancia en la Tercera División hasta que en la temporada 1962/63 volvieron a descender a Preferente. La etapa se caracterizó por los constantes cambios en los estamentos del club y sólo dos personas, Martín Juanes y Emilio Gálvez, repitieron después en los años 70 como rectores. Los años más oscuros de la historia toledana coinciden con dicha década.

Ya en los años 80, Francisco Barrientos, Félix Rodríguez, Rafael Rodríguez y Antonio Díaz García prepararon el terreno para la llegada al palco de Manuel Torres Astilleros. El después vicepresidente y asesor deportivo en otras etapas más recientes cumplió mandato desde 1985, con el equipo en Primera Regional, y lo acabó en 1991, tras dos campañas seguidas, por primera vez en su historia, en la Segunda División B. Falleció en agosto de 2019.

Antonio Mayoral hizo de puente hacia Emiliano Carballo, presidente con el que el cuadro capitalino disfrutó de su etapa más laureada en Segunda División. El descenso a Segunda B, con Antonio Muñoz Perea, dejó paso a otro cambio constante de caras en la presidencia. Regresó Eduardo Herrera y el ‘lío Invercon’ vio pasar a tres hombres en 2003: Quique Ramos, Paco Gómez y Ramón García Samaranch.

Este último, como cabeza visible del Grupo Salvatol, se hizo finalmente con las riendas hasta que en 2007 Pedro Pablo Gómez Ovejero asumió las funciones durante un año y medio tras la venta a la empresa Arquinver. De todos modos, cedió su lugar a Juan José del Valle antes de acabar la temporada 2008/09.

Con él al mando, el CD Toledo logró dos ascensos a Segunda B, pero también dos descensos que acabaron provocando el relevo de Fernando Collado. El de La Mata puede presumir de muchos éxitos fuera del campo, pero también de retornar a la categoría de bronce y de disputar tres ‘play off’ de ascenso, empañados, eso sí, por una temporada 2017/18 nefasta en lo deportivo. Juan Juárez nunca logró cuajar y sus desavenencias con Jorge Berlanga le acabaron apartando de una estancia más amplia.