Las Cortes de Castilla-La Mancha tendrán su propio plan de Igualdad. Así ha quedado reflejado en el acuerdo firmado este miércoles entre el parlamento regional y la Junta de Comunidades, y que tiene como principal objetivo que las administraciones e instituciones públicas se conviertan en un ejemplo para la empresa privada a la hora de acabar con la brecha salarial y laboral entre hombres y mujeres. Y es  que, como ha subrayado la consejera de Igualdad, Blanca Fernández, «tenemos la obligación de dar ejemplo» en  la «pelea» para conseguir que «la igualdad material sea una realidad».

Una plan de igualdad que ha sido apoyado por los tres grupos con representación en la cámara autonómica (PSOE, PPy Ciudadanos).

El protocolo ya en marcha contempla tres fases: una primera de diagnosis para conocer la situación de las personas que trabajan en las Cortes e identificar si hay brechas de género, otra segunda que consistirá en la elaboración del Plan, y una tercera que será la de revisión y seguimiento. La Consejería de Igualdad tendrá como principal tarea asesorar a la Cámara autonómica en el diseño de este plan.

Como defiende la consejera de Igualdad, este tipo de planes son esenciales para generar un cambio en el modo de pensar de la sociedad, contribuyendo a la progresiva eliminación de las brechas laborales. Brechas que se traducen en sueldos entre un 20 y un 25 por ciento más bajos para las mujeres y una aún muy baja presencia femenina en los cargos directivos.

En el caso concreto de las Cortes de Castilla-La Mancha, este plan buscará fomentar la igualdad en la gestión de los recursos humanos. Básicamente, la mejora de las medidas de conciliación de la vida laboral y familiar, ya que el acceso, al ser personal funcionario, está regulado por ley.

Además, el presidente de la Cámara, Pablo Bellido, se ha comprometido a que las leyes que salgan aprobadas tengan «un claro enfoque de género y respeto a todas las personas» y que todas ellas estén redactadas con «lenguaje inclusivo».

Además, Bellido ha avanzado la intención de las Cortes de dar un paso más y sacar a la luz « personalidades históricas femeninas» de Castilla-La Mancha.

En concreto, la propuesta del presidente de las Cortes pasa por organizar anualmente actividades de carácter cultural, en cooperación con otras instituciones, que recuperen protagonistas femeninas de la historia regional.

Una de las primeras conmemoraciones que podría verse beneficiada de este enfoque de género sería la de los 500 años del levantamiento comunero en Castilla, que arrancaría este mismo abril con la celebración del levantamiento de la ciudad de Toledo contra Carlos V.