Una buena acogida. Es la mejor forma de definir la puesta en marcha del grado de Ingeniería Aeroespacial en Toledo de la mano de la Universidad de Castilla-La Mancha. Las clases se inician este mes y el primer curso ‘oficial’, a pesar de que este año la titulación se estrenó  con 37 alumnos, contará con 80 matriculados, una cifra que confirma la alta demanda de una ingeniería que contemplaba 60 plazas nominales con posibilidad de ofertar un máximo de 120 en función de la acogida. 

«Es un éxito», explica el director de la Escuela de Ingeniería Industrial y Aeroespacial, Fernando Castillo, satisfecho con el hecho de que la titulación se oferte a veinte alumnos más de los previstos inicialmente. En principio, las previsiones indicaban la posibilidad de que la UCLM tuviera que ocupar las 120 plazas posibles después de recoger más de 220 solicitudes de preinscripción en julio, pero la bajada de matriculaciones «suele ser normal» en todos los grados a pesar de que se realicen reservas previas porque se solicitan estudios en distintas comunidades autónomas y cambios en la elección de grado.

En líneas generales, Castillo está  muy contento con los resultados tras el periodo de matriculación de este grado y de los restantes de la Escuela de Ingeniería Industrial y Aaeroespacial «porque se está expandiendo», ya que contará prácticamente con 200 alumnos en este nuevo curso en Toledo. Por tanto,  en Ingeniería Electrónica se han matriculado 75 personas y 40 más en Eléctrica, más del doble del curso anterior.

Por otro lado, esta escuela también estrena este curso el máster universitario de Ingeniería Biomédica, otra apuesta de la UCLM que espera calar y consolidarse en los próximos años.

futuro. Ingeniería Aeroespacial es un grado con buenas salidas profesionales. La UCLM decidió apostar por esta titulación, tras la alta demanda que existía, e impartirla en el Campus de Toledo después de meses de análisis y de búsqueda de la mejor sede contando con las empresas del sector, la mayoría ubicadas en la provincia. El grado nace además vinculado al Instituto de Investigación Aplicada a la Industria Aeroespacial (INAIA) que se puso en marcha hace un par de años y aún tiene pendiente trasladarse a su nueva sede, una antigua nave industrial en la Fábrica de Armas en rehabilitación.

Pese a que el grado arranca oficialmente este mes, una vez salvados y cumplidos todos los trámites administrativos ligados al plan de estudios y la memoria de grado, 37 alumnos han cursado el primer año, ya que el primer año de Ingenería Eléctrica comparte prácticamente todas las asignaturas de Aeroespacial salvo una, con lo que este alumnado ha optado al segundo curso de esta última si lo ha solicitado. 

El grado de Ingeniería Aeroespacial no se imparte en muchas universidades, únicamente en una decena de ellas. En este caso, no se repite lo que ocurre con otras ingenierías, con bastantes escuelas repartidas por el país. Si bien, de las cuatro especialidades posibles dentro del grado, Toledo se ha decantado por un módulo de tecnología específica en equipos y materiales aeroespaciales, unos estudios que no se imparten en ningún otro centro universitario en un radio de 500 kilómetros. 

En principio, los futuros ingenieros se volcarán en el desarrollo profesional del diseño, construcción, mantenimiento de aeronaves, análisis, supervisión de materiales y control de calidad. Además, Ingeniería Aeroespacial pasará a engrosar la lista de titulaciones preferidas en el ámbito empresarial, junto a las ligadas a la tecnología y a las matemáticas.