Puy de Fou sigue sumando empleados y presume de concepto mientras las obras avanzan en la finca Zurraquín. Esta semana, la empresa firmó a los primeros 30 actores para sus espectáculos. El director general adjunto en España aborda la realidad de un ambicioso proyecto que transformará la realidad social, económica y turística de la ciudad.

La marca Toledo se asocia a las ideas de ciudad patrimonio, de las tres culturas y del casco histórico monumental. ¿Qué aporta Puy de Fou a esa imagen de ciudad?

Es importante conocer bien el concepto de Puy du Fou. Se nos mete en la categoría de parque temático cuando distamos mucho de serlo. Y por muchas cosas. ¿Cuál es nuestro concepto? El parque francés es el fiel reflejo de lo que vamos a hacer aquí. Es exactamente lo que vamos a hacer en Toledo, cambiando el contenido, pero con la misma filosofía tanto en la gestión operativa como en la construcción física del parque que se ubica en un entorno natural que tiene un respeto brutal por la naturaleza. 

Puy du Fou es un parque de emociones. Pero la emoción no es sólo ver el espectáculo, sino disfrutar de los pueblos, la artesanía, el paseo y la naturaleza. Es todo un compendio. Cuando vamos a un parque temático al uso nos encontramos con un parque de experiencias donde esa experiencia pasa por subirse a una atracción y soltar adrenalina. Aquel es su concepto. El nuestro es de sensaciones: ir a un espectáculo que cuenta una historia que emociona, dar paseos con la familia por una naturaleza que envuelve, estar dentro de pueblos que sitúan en una época y en una historia anterior en la que se pueden ver edificios antiguos y a nuestro personal con trajes de época mientras se disfrutan de actividades artesanales que trasladan a tiempos anteriores.

Nos vemos como un complemento a lo que ya es Toledo. La ciudad disfruta de unos monumentos que ninguna otra en España tiene. Es increíble cómo se conserva aquí el paso de la historia. Queremos acercar a todos los visitantes que llegan a conocer más de su historia a través de espectáculos en vivo y un contexto histórico. Y sin adoctrinar: cogemos una ventana de la historia de España y sobre ella creamos una novela histórica, mediante una puesta en escena cuidada y con efectos especiales muy buenos. Es una historia que emociona, que llega al corazón y transporta a las raíces de cada cual. Pero sin ánimo de entrar en polémicas porque somos mucho más neutros que todo eso.

La ciudad tiene 84.000 habitantes y la provincia suma casi 700.000. Vienen tres millones de turistas. ¿Hay músculo para que Puy du Fou arraigue aquí?

Nos nutriremos de la gente de Toledo, pero también de toda España. Estamos a 50 minutos de un núcleo urbano como es Madrid, con más de seis millones de habitantes. Nuestra estimación es que en torno a un 60% o 70% de nuestro público sea español, y el 30% o el 40% restante será extranjero. El público de Madrid será tremendamente importante por la localización del parque. Es muy fácil llegar desde una ciudad como Madrid. En autovía son poco más de tres cuartos de hora hasta la misma puerta.

Para nosotros, Toledo es el sitio idóneo por el contexto cultural y la localización. Está en un punto geográfico equidistante al resto de provincias españolas.

Pero en Madrid hay ofertas similares como el Parque de Atracciones o el Parque Warner.

Competimos porque estamos dentro del mismo sector de ocio, pero el público objetivo es muy distinto. Eso nos diferencia. Quienes, por ejemplo, van al Parque Warner buscan adrenalina y su edad está limitada: está pensado para entre los quince y los cincuenta años aproximadamente. Un parque como el nuestro abarca desde los cuatro hasta los 99 años, por poner un límite. Ahí tenemos una distinción; otra, en los colegios. Ofrecer este tipo de propuestas a las escuelas es muy fácil. De hecho, ya lo estamos haciendo, ya estamos consultando a directores de colegios y parecen todos encantados. Es dar cultura a los alumnos, ofrecer otro tipo de salidas: al final los niños aprenden y se divierten. Por eso no nos da miedo competir con Parques Reunidos, Faunia o Parque Warner.

Los críticos al proyecto aluden a su megalomanía, señalan al empleo e insinúan que el parque podría convertirse en un “muerto viviente” como Terra Mítica.

Este es un concepto que funciona en Francia, una idea exitosa desde hace cuarenta años. Los números no sólo salen sino que son muy rentables. Y lo que traemos aquí es exactamente igual, el mismo saber hacer. Al final lo que estamos cambiando es el contenido. Hemos hecho test, exámenes muy grandes, con gente española que ha visitado al parque de Francia [Les Epesses]. Y vienen encantados. Además, tenemos las listas de TripAdvisor en la categoría de parques temáticos en las que usuarios de todo el mundo evalúan su experiencia en cada parque. El resultado, en el año 2018, es que Puy de Fou es el primer parque en Europa y el tercero del mundo.

Con estos mimbres no se puede nos comparar con Terra Mítica. Con el saber hacer de Puy du Fou y trasladando lo que tenemos en Francia hasta aquí, la probabilidad de que esto se convierta en ese muerto viviente es muy baja. Y lo es porque ya hay una prueba.

La financiación del proyecto, a través de deuda y de capital, lleva cerrada desde antes de verano. Son entidades de primera fila, tanto las entidades financieras como nuestros accionistas. Estamos hablando de Mapfre, Caixabank y o Crédit Mutuel [banco francés]. Son entidades serias que también hacen sus análisis de mercado.

¿Cuáles son las grandes cifras de Puy du Fou Toledo? ¿Cuál será su impacto tangible en la ciudad? ¿Empleo? ¿Turismo?

Puy du Fou es ya una realidad. Tenemos la financiación, tenemos los permisos y hemos empezado a construir con la colocación de la primera encina. Además, hemos anunciado que el 19 de febrero comenzará la venta de entradas y que el 30 de agosto inauguraremos el espectáculo nocturno. El proyecto va para adelante. Estamos contratando empleo directo. Ya tenemos 41 trabajadores en la oficina. Hoy [por el viernes] vamos a hacer un casting para contratar a 30 personas más. Y dentro de tres meses haremos otro casting para contratar a otras 130 o 140 personas para completar los actores del espectáculo nocturno, además de los técnicos que ya estamos contratando.

Estamos creando empleo directo e indirecto. La contratación es palpable porque la mayor parte de nuestros trabajadores son de Toledo o de Castilla-La Mancha. Además, en 2019 Puy du Fou va a pagar al Ayuntamiento de Toledo en conceptos de canon e ICIO [Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras] cerca de 1,9 millones de euros. Y esta es otra realidad.

No creemos que nuestra llegada vaya a favorecer la saturación del Casco histórico. Estamos dentro de Toledo, pero a nueve kilómetros del centro. El acceso es a través de la CM-40, no cruzando la ciudad.

¿Cómo valoran el papel jugado respecto a la instalación de su proyecto por parte de las administraciones municipal y regional?

Entre los años 2017 y 2028 vamos a invertir 242 millones de euros. Si lo hubiéramos planteado en cualquier otra provincia u en otra administración, todas hubieran querido que lo pusiéramos allí porque saben las bondades que esta inversión va a generar al territorio. Castilla-La Mancha y Toledo han sido favorables a la inversión porque han visto todos los efectos colaterales beneficiosos en términos económicos y de empleo que Puy du Fou va a traer. 

Lo primero que nos dijeron las administraciones fue que querían que lo implantáramos aquí, pero que teníamos que hacer los trámites que fueran necesarios. Han sido diligentes y exigentes. Nos han reclamado hasta el más mínimo informe y el más mínimo detalle. ¿Favorables al proyecto? Evidentemente, pero cumpliendo la norma y la ley y a eso nos hemos atenido desde el principio. No hemos tenido un trato de favor. Incluso, y dada la envergadura del proyecto, hayan podido ser más exigentes en cuanto a la información que nos han solicitado. 

La administración quiere hacer cumplir la ley, como no puede ser de otra forma. Pero en nuestro caso han dado un paso más y aspectos o informes que no se requerirían para un proceso como es el del Proyecto de Singular Interés (PSI), y que vendrían para fases posteriores, ya nos los han pedido para la aprobación definitiva del PSI. Sí ha podido ser excesivo en algunos momentos, pero lo entendemos por la imposibilidad de comparar este proyecto con otros.

Quieren inaugurar el parque el 30 de agosto. En estos ocho meses, ¿hay tiempo suficiente? ¿Qué ritmo de trabajo se lleva en la finca Zurraquín?

En ese tiempo hay que construirlo, formar al personal y hacer los ensayos oportunos. Estamos convencidos de que nos da tiempo a hacerlo. Es un reto, es una apuesta de trabajo fuerte, pero lo conseguiremos. Saldrán imprevistos, como en todos los proyectos, pero tenemos la capacidad de afrontarlos y de llegar a tiempo al 30 de agosto con nuestros equipos.

En la finca hemos empezado la fase de desbroce y movimiento de tierras y pronto entraremos en la de infraestructuras. Alrededor de un centenar de personas está trabajando allí diariamente.

¿La construcción del parque traerá la destrucción de patrimonio medioambiental?

La finca se va a revalorizar en cuanto al entorno vegetal. Sólo hay que ver cómo es nuestro concepto en Francia. Allí estamos en un bosque atlántico y aquí no podemos aspirar a tener esa altitud en los árboles. Para que nuestro parque funcione tiene que haber vegetación. Y hoy, esa finca no la tiene. Pero la va a tener.

¿Qué opinión les merecen el movimiento crítico y sus argumentos?

Las críticas siempre son aceptables, independientemente de que sean mayoritarias o minoritarias. Pero cuando dicen que no hay empleo estable se topan con una realidad muy distinta. Que  pregunten a nuestros empleados por el trabajo que se está creando. Y pongo un ejemplo: estamos contratando a estudiantes de la UCLM, excelentemente formados y con muchas ganas de trabajar, que empiezan con nosotros en prácticas y les terminamos cogiendo por su buena labor y motivación. No había visto tal grado de compromiso antes. Que les digan a ellos que no estamos creando empleo. Cuando les contratamos en prácticas, no vienen a poner cafés y hacer fotocopias: los arquitectos, por ejemplo, están trabajando en el diseño desde el primer minuto. Los contratamos porque creemos en ellos y les estamos dando la oportunidad de desarrollar un carrera aquí.

Para los actores ya estamos haciendo los casting. Los contratos son de un año para otro y a medida que avance el tiempo la carga de horas será mucho mayor.

Esperamos tener en plantilla a 600 o 700 personas trabajando en 2021. Son las que necesitamos para explotar el parque. En 2028 llegaremos a las 900 o 1.000 personas, más otras 2.500 empleados en empresas que nos prestarán servicios externos.

¿Se incorporarán perfiles muy diversos?

De 70 personas que se presentan a este primer casting seleccionaremos a 30, entre jinetes, amazonas, bailarines, actores y acróbatas. Les llevaremos a Francia a formarse y regresarán después a España. Posteriormente contrataremos al resto; sumarán en total unos 180.

La experiencia que tenemos en Francia es de gente que, por distintas razones, no tiene muchos estudios, pero que encuentran una salida gratificante. Aquí nos está pasando lo mismo: son perfiles que sienten pasión por el mundo del espectáculo y que ahora sólo se puede dedicar a ello, en algunos casos, una vez al mes.

¿Qué historia de España se va a narrar en el espectáculo? ¿Qué pasajes se incluyen?

En el espectáculo nocturno vamos a contar 1.500 años de historia. Empieza en el año 350, época  anterior a los reyes godos, y termina en 1850, con la llegada del ferrocarril. Será una historia de España vista desde la ciudad de Toledo. No venimos a adoctrinar, ni a posicionarnos de ninguna forma. Venimos a contar una novela historiada y que nuestros visitantes, familias y amigos, disfruten de un excelente momento que les llene y les deje un poso. Nuestros espectáculos tienen una carga emocional importante.

El espectáculo en Francia trata las guerras mundiales. ¿La Guerra Civil tendría sitio en España?

La Guerra Civil se podría abordar, pero no queremos hacerlo. La historia de España es muy rica e ir a una ventana que ha creado tanta división... Lo que necesita el pueblo español es pasar página y el problema es que no lo hacemos. Proponemos un parque que una, no que crea conflicto. Preferimos rescatar leyendas, fábulas y personajes que han ocurrido y participado en la historia de Toledo y ponerlas en valor. Queremos proyectar al héroe anónimo porque es el origen de nuestras raíces.

¿Qué ofrecerá Puy du Fou desde agosto? ¿Y en los próximos años? ¿Cuál es la estrategia de comunicación y marca?

En este año vamos a hacer quince pases. Hay que hacer un buen trabajo para atraer a la gente y seguir dándonos a conocer. Más allá de Toledo, hay que hacer una labor comercial y de marketing importante. Tenemos que explicar el concepto, nuestra filosofía. Fitur nos ha dado una visibilidad enorme y esa buena acogida nos hace ser positivos. Abrir en 2019 es una estrategia comercial para prepararnos de cara a 2021. Por eso era importante hacerlo este año. Estamos convencidos de que va a ser un éxito y de que funcionara el boca-oreja.

Para acceder al arrabal, el poblado que da entrada el parque, no hay que pagar entrada. Será una zona de restauración, concebida para tomar tapas y vino. Habrá productos como jamón, tortilla, croquetas o ensalada. Pondremos terrazas y crearemos un espacio acogedor para quienes llegan antes del espectáculo nocturno. Huimos del fast food: queremos comida elaborada y no franquicias. La zona de tapeo sólo estará abierta los días de espectáculo.

Sí habrá espacio para el merchandising en la zona del espectáculo, cosas que se puedan necesitar como chubasqueros, paraguas o chaquetas. Pero nos interesa más la presencia de los artesanos.