UPA reclama la ayuda de las administraciones

Mario G. Gutiérrez
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Desde la Unión de Pequeños Agricultores demandan que se tomen «medidas estructurales» para evitar las pérdidas entre costes de producción y precio de venta de los agricultores del olivar tradicional

UPA reclama la ayuda de las administraciones

Con un sencillo acto reivindicativo, la Unión de Pequeños Agricultores, reclamó medidas urgentes para paliar la complicada situación que vive el olivar tradicional y la producción de aceite. 

Precios a la baja, que dañan sobremanera la producción de este «oro líquido». En un acto llevado a cabo en los arcos del Recinto Ferial, y coincidiendo con el trasiego de personas hacia el mercadillo,  se quiso además poner «en valor el trabajo de los agricultores», de España y de Castilla La Mancha y centrarse en el olivar tradicional.

Así lo manifestaba Elisa Fernández, secretaria general de UPA Toledo, a la vez que agradecía  la presencia de los diferentes grupos políticos, miembros de cooperativas y de UGT.

Una cata de aceite que sirvió para explicar al consumidor y «hacer llegar la voz a las administraciones» acerca de la delicada situación que tienen los agricultores y la produccion del olivar.

El olivar tradicional produce un kg. de aceite con un coste de 2.60 euros y el precio que recibe el agricultor es de 2.30euros, explicaba Fernández, quien añadió que «para que esto fuese rentable, el precio de venta del agricultor no debería ser inferior a 3euros/kg».

De esta forma, lo que reciben es un importe por debajo de lo que cuesta producir, convirtiéndose en una situación que «nos tomamos como habitual, pero es muy dañina», y que se extiende no solo en este sector, sino en todos aquellos que se derivan de agricultura y ganadería.

Llamada de atención por tanto a la administración y al consumidor, ya que este tipo de explotaciones, son muy necesarias y que con esta dinámica es complicado que subsistan.

«Ahora que tanto se habla de despoblamiento lo que tienen que hacer es poner medidas sobre la mesa y presupuestar para que esta situación no se de» decía Fernandez, abogando por intentar que la ley proponga mecanismos para que no ocurra lo que está pasando. 

Además denunció Fernández, que las cadenas de distribución y grandes supermercados utilizan el aceite como reclamo, ofertándolo a muy bajo precio para que la gente acuda a comprarlo al establecimiento y ya de paso «llene el carro de la compra». Esta praxis, provoca que sea siempre el aceite uno de los productos que más ajustado tenga el precio, incurriendo en una reducción de la cantidad que llega a los productores

Quiso destacar la necesidad de plantear medidas para que se produzca un etiquetado detallando la procedencia del producto, lo que permitiría diferenciar el producto autóctono y poderlo comercializar en consonancia.

También en estos momentos se neegocia la próxima PAC, en la que según declaró «necesitan» que se reflejen esos mecanismos para contar con una solución estructural que rectifique dicho problema y no coyuntural, pues a corto plazo «no solucionaría el problema de fondo.

Por su parte Julián Morcillo, secretario general de UPA Castilla-La Mancha, denunció la situación del sector y su incredulidad ante la caida del precio del aceite de oliva en un valor aproximado del 35%.

Destacó la buena producción en Castilla La Mancha, frente a un ligero descenso a nivel mundial, siendo la demanda muy similar, queriendo poner en valor lo curioso de una situación de precios a la baja, cuando en paises productores como Italia, el precio de producción es el doble que en nuestro país.

Esta serie de actos reivindicativos, según Morcillo, están sirviendo de preambulo a una gran manifestación que tendrá lugar en septiembre en Madrid si la situación general y de precios no cambia de manera sustancial.

La necesidad de poder autorregularse dentro del sector, la posibilidad de aprobar un almacenamiento voluntario, y que en la modificación de la PAC (al igual que ya otros sectores disponen) medidas de autoregulación a todo el sector; son algunas de los planteamientos que desde UPA se plantean a las administraciones estatales y europeas para poder revertir la situación a medio y largo plazo.