A la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, se la veía cómoda, entre amigas y viejas compañeras de lucha, durante la clausura de la mesa redonda ‘Avances de las mujeres durante los últimos 30 años’, con la que la asociación Dama celebró en la sala Thalía del Polígono su trigésimo aniversario. Momento para recordar lo que hoy pueden parecer anécdotas, pero que sin duda fueron hitos en la vida de tantas.
Porque situaciones que hoy se ven tan normales, recordó Tolón, no lo eran hace treinta años. Hace tiempo no era normal hablar de igualdad o decir «yo soy feminista, porque creo en la igualdad de hombres y mujeres». Y hoy sus hijos no conciben que hace cuarenta años una mujer no podía tener su cuenta corriente sin el permiso de su padre o marido, o no podía ir a una manifestación, tener un negocio o heredar primero.
Sin embargo, ahora «no es casual que hoy aquí esté clausurando estas jornadas una mujer como alcaldesa, no es casual que haya una concejala de Servicios Sociales o una presidenta o una doctora aquí, es fruto del trabajo que se ha hecho durante muchos muchos años».
Ya en su primer discurso de investidura, recordó, quiso hacer un guiño a las mujeres anónimas, a las «madres y abuelas», como la suya y las de todas «que han luchado mucho para que hoy estemos aquí, y que han luchado mucho para que sus hijas puedan tener independencia, sobre todo, económica». Si no hubiera sido por nuestras madres, yo hoy no estaría aquí», sentenció.
La labor que hacen las asociaciones de mujeres, apuntó, ha sido aquí también muy importante. Dama lleva treinta años en el Polígono, «un barrio que no era como ahora». Dama no solo ha hecho labor desde el punto de vista lúdico, que también, «pero también de concienciación y educación a nosotras mismas las primeras, porque las primeras que nos tenemos que educar somos las primeras». En esos treinta años, ha hecho del Polígono un referente de la igualdad.
La alcaldesa se mostró convencido de que Toledo tiene muchos buenos adjetivos como ciudad, «pero el mejor patrimonio que tiene es su tejido social y que ayuda a la gente vulnerable», como hace la asociación María de Padilla.
También se acordó del Consejo Local de la Mujer, «el que mejor funciona de toda Castilla-La Mancha», gracias a sus componentes; y de la Casa de Acogida, donde cada vez hay mujeres más jóvenes, con sus hijos.
Después de todo eso, y de todo lo que ha costado llegar hasta aquí, Tolón pidió a todas que «no retrocedamos». Como también pidió que «no nos dejemos engañar, porque sí existe violencia machista». Es más, «el ochenta por ciento de las mujeres maltratadas tienen todas máster». Por lo tanto, «no es una cuestión de condición social, es una cuestión de género, en la que tenemos que luchar».