Tras el vendaval siempre llega la calma. Los días ventosos terminaron con una jornada soleada y de buena temperatura que ayudó a que los toledanos salieran de sus casas el día 24 a mediodía a celebrar las tradicionales migas en todos los barrios de la ciudad. Las cañas iban y venían en las barras de los bares que sacaron sus barras a la calle y en los que también abrieron durante todo el día para ofrecer paella, patatas guisadas y otras tapas con las que acompañar la cerveza y los refrescos.
En Santa Teresa el público, sobre todo, el juvenil madrugó. A las doce y media comenzó a llenarse el aparcamiento disuasorio y el barrio no tardó en ambientarse. La estampa de la Plaza de Cuba y de los alrededores abarrotados volvió a repetirse un año más, pero esta vez sin el molesto sonido de los petardos de vez en cuando para dar ‘la gamberrada’. La oferta de los bares cada vez es más variada, incluso algunos colgaron carteles desde primera hora anunciando bocadillos y pinchos morunos como alternativa a las famosas migas que todo el mundo suele probar cuando sale de cañas en Nochebuena.
Santa Teresa y el Polígono fueron los barrios con más tirón y más público. Si bien, también son los que siempre han concentrado la celebración desde hace años, pero hay otros que van cobrando mucha vida en esta jornada, como ocurre con Santa Bárbara y con el Casco Histórico, cada vez con más gente en los alrededores del Teatro de Rojas y en otros establecimientos cercanos. También Buenavista se está poniendo a la altura y lejos quedan ya esos años en los que un solo bar ofrecía migas en un barrio con cerca de 15.000 habitantes.
Las migas del 24 abarrotan los barriosseguridad. El día se desarrolló con normalidad, sin incidencias significativas. El despligue policial fue importante, tanto de la Policía Local como de la Nacional. Los controles de alcoholemia y el cumplimiento estricto de la normativa por parte de los bares, en relación a las barras que sacaron a la calle, garantizaron una jornada tranquila. Quizá lo más reseñable sea que la Policía Local tuvo que retirar un equipo de música de unos jóvenes para el que no tenían permiso. Y ayer detectaron por la mañana a un vehículo en el que viajaban varios jóvenes que circulaba haciendo zig-zag y los agentes evitaron que continuara circulando tras una prueba de alcoholemia positiva.
Hay imágenes que se repiten año tras año, como la de la charanga de los vecinos del Polígono, los gorros de Papa Noel, la de muchos toledanos guardando la cuchara de una de las raciones para hincar el diente en la siguiente o el paseíllo de autoridades políticas para tomar una caña en el Polígono y en Santa Teresa.
En esta ocasión, la alcaldesa de la ciudad, Milagros Tolón, y su equipo de Gobierno compartieron un rato de charla y unas migas con el presidente de la región, Emiliano García-Page, y algunos cargos del Gobierno regional, que disfrutaron del sol en esta jornada navideña.