Malestar vecinal por una ocupación ilegal en Bargas

Redacción
-

Los vecinos se manifestaron ante la casa ocupada en la tarde noche del lunes. Repetirán cada día estas concentraciones. Entre los ocupantes de esta vivienda hay menores

Malestar vecinal por una ocupación ilegal en Bargas

Otro caso más de ocupación ilegal acecha esta vez a Bargas. No es extraño asistir a ocupaciones ilegales de viviendas abandonadas en manos de entidades bancarias que a la postre provocan, en la mayor parte de las ocasiones, problemas de convivencia vecinal cuando no conflictos entorno a hechos delictivos.

Esta reciente ocupación se produjo el domingo por la tarde en un chalé de la urbanización Valdelagua y algunos de los vecinos fueron testigos en primera línea del trasiego de personas entrando y saliendo de la casa con diversos enseres e incluso cambiando ventanas. Así pues, dieron aviso a la Guardia Civil y a la Policía Municipal de Bargas que se personaron en el lugar de los hechos pero sin  poder actuar. «Vieron perfectamente todo y esto se ha llenado de gente, han hecho sus enganches ilegales a los suministros y ahí se han quedado», lamenta una vecina.

Esta ocupación ha tenido una respuesta vecinal inmediata porque solo 24 horas más tarde, la mayor parte de los residentes en esta urbanización se organizó para concentrarse a las puertas del chalé ocupado y mostrar su rechazo a este tipo de actuaciones. 

Porque señalan vecinos de la zona, «no podemos permitir que se produzcan conductas así, somos los primeros que si tenemos que ayudar a gente necesitada lo haremos, pero no estamos de acuerdo en que se quebrante la ley y queremos vivir seguros y tranquilos en nuestras casas».  

«Cuando fuimos a la casa, todos muy tranquilos, para decirles que nos explicaran cuáles eran sus objetivos, salieron dos chicos jóvenes muy bien vestidos y de muy buenas maneras, hay que reconocerlo, dijeron que no querían problemas que ellos estaban para trabajar,...», explican los vecinos. Sin embargo, esta buena disposición temen que pueda llegar a ser simple apariencia y se niegan a que cunda el ejemplo de que «se pueden ocupar las casas alegremente».

Temerosos de que esta ocupación ilegal pueda llevar aparejado problemas de convivencia y delincuencia, los vecinos se han puesto en contacto de forma inmediata con el Ayuntamiento de Bargas para que tome medidas al respecto puesto que, además, «es una cosa que nos tiene indignados», apuntan los vecinos, «tienen menores con ellos. Salieron el día de la concentración con un bebé para darnos pena y les abucheamos porque no tienen que utilizar a los menores para sus fines», reprochan los vecinos que hacen hincapié en la irresponsabilidad de las entidades bancarias que no se ocupan de las viviendas abandonadas que se convierten en el polo de atracción de  los ocupas.

 Una delegación de vecinos mantuvo ayer una larga reunión con los responsables municipales, casi dos horas y media, y concluyeron en dejar un tiempo para que el Consistorio se ponga a trabajar en este asunto. «Ha sido una reunión cordial y estamos en sintonía», señalaban los vecinos reunidos, pero «vamos a mantener las concentraciones a la puerta del chalé todos los días porque no queremos que esto se quede aquí y vamos seguir presionando con esta pacífica medida para ver si conseguimos que se vayan».

Confían, con reservas, en la actuación municipal para lograr el desalojo de estas personas porque les han asegurado que tanto Guardia Civil, como Servicios Sociales y Policía Local han iniciado los trámites oportunos para estos casos, pero son conscientes de que el protocolo para desalojar a estas personas puede retrasarse muchos meses. Y precisamente esta situación les in tranquiliza porque no quieren que esta casa, por las dimensiones y localización, se convierta «en un cuartel general» de algún grupo delicuencial organizado.