El delegado del Gobierno en la región, Manuel González Ramos, dijo esta mañana que quería ser «prudente» y que no se mezclase el posible sabotaje con el descarrilamiento de un tren a la altura de Torrijos el pasado lunes con los problemas que ha tenido esta línea ferroviaria en los últimos tiempos.
Confirmó que «Adif y Renfe han denunciado presuntos delitos, se han visto restos de traviesas». Ante estos hechos, señaló que «la Guardia Civil está realizando el correspondiente atestado» y garantizó que «se va a investigar con mucho rigor» lo sucedido.
En cuanto a la hipótesis de que hubiera sabotaje detrás de lo ocurrido el lunes, el delegado confesó que no le entra en la cabeza lo que podría buscar el o los responsables. «Creo que no puede interesar a nadie», expuso, «¿se pueden imaginar que hubiera ocurrido una desgracia?». El tren descarriló estando todavía en el entorno urbano de Torrijos, pero no llegó a volcar, lo que sin duda fue crucial para que no hubiera heridos entre los 33 pasajeros y los dos operarios que viajaban en el tren.