Jon Rahm, que podría haber alcanzado el número uno mundial con una victoria en el torneo de Phoenix, acaba en novena posición con el estadounidense Webb Simpson como nuevo campeón del Abierto al ganar en el desempate a su compatriota Tony Finau, que había llegado a la cuarta y última ronda como líder.

Jon Rahm completó su actuación en el Abierto de Phoenix con una cuarta y última vuelta de 70 golpes (-1) para 273 totales (-11), lejos de poder optar a una victoria que lo habría catapultado hasta el puesto de número uno de la clasificación mundial de golfistas profesionales.

El vizcaíno tuvo este fin de semana la opción de alcanzar por primera vez la cima del golf mundial en el caso de ganar en Scottsdale y que el actual número 1, el estadounidense Brooks Koepka no acabara entre los tres mejores en el Saudí International, del Circuito Europeo.

El segundo factor se cumplió, pero la victoria en Phoenix quedó muy lejos. Empezó la jornada de cierre a seis golpes de la cabeza y poco a poco fue alejándose aun más.

Comenzó bien, con birdie al 4, pero los bogeys en el 45, el 7 y el 9 lo clocó con +2 en la ronda. Enderezó algo el rumbo con birdies al 11, al 13, al 15 y al 17, pero ya era tarde y acabó la vuelta con 70 impactos (-1).

El resultado impide a Rahm alcanzar el número uno, en el que esta semana permanecerá Brooks Kopeka, que una semana más tarde (desde el 10 de febrero) será relevado por el norirlandés Rory McIlroy. Si hubiera acabado segundo en Scottsdale, Rahm podría haber sido el número uno una semana más tarde.

Webb Simpson y Tony Finau acabaron el torneo empatados con totales de 267 golpes (-17) y tuvieron que decidir al campeón en el hoyo 18, en el que Simpson, de 34 años, decimosexto en la Ranking de la PGA, hizo un birdie con tres golpes, uno menos del par que tuvo Finau.

El nuevo campeón del torneo, el primero que consigue esta temporada en los cuatro que ha disputado, acabó el recorrido con una tarjeta de 69 golpes (2 bajo par) después que hizo cuatro birdies y dos bogeys.

Simpson confirmó su buen momento de juego y se metió en la lucha por el título al acabar el sábado el recorrido con una tarjeta de 64 golpes (7 bajo par) y ser el segundo clasificado (-15) tras haber subido seis puestos.

Mientras que Finau, de 30 años, no tuvo su mejor juego y entregó otra de 70 golpes (1 bajo par) con apenas dos birdies y un bogey después que en la tercera ronda del sábado había logrado 62 (9 bajo par).

Finau, clasificado 52 en el Ranking de la PGA, buscaba su primer título desde que ganó el Abierto de Puerto Rico en el 2016, que además es también el único título que tiene en su poder como profesional.

El tercer puesto fue para el también estadounidense Justin Thomas, que entregó la mejor tarjeta de la última ronda con 65 golpes (6 bajo par) que le permitió acabar con (-14), empatado con sus compatriotas Nate Lashley y Bubba Watson.