La normativa urbanística es clara y las propiedades tienen que cumplir con los criterios para mantener la conservación y seguridad en los inmuebles del Casco. Por tanto, la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo ha requerido a la congregación de las religiosas del convento de Las Comendadoras que efectúen la reparación del muro que se mantiene actualmente apuntalado por su mal estado.

«Confío en que lo arreglarán pronto», apunta el concejal del área, José Pablo Sabrido, pendiente del problema. Asegura que conoce de cerca el mal estado del muro porque pasa con frecuencia por la  Subida de la Granja y espera que el requerimiento que se ha enviado desde el Ayuntamiento recientemente  se materialice lo antes posible. De momento, no ha recibido respuesta, pero lo cierto es que en una actuación de estas características lo que cuenta es la reparación de la zona afectada para asegurar  la conservación del convento y cumplir con unas mínimas normas de seguridad y salubridad para evitar riesgos por posibles derrumbes.

En este caso, los técnicos municipales inspeccionaron hace semanas el estado del muro que está apuntalado para evitar problemas.

otro episodio similar. El convento de Santo Domingo el Real también pasó hace un año por una situación similar con uno de sus muros de cerramiento. En este caso, el Ayuntamiento tuvo que elevar una orden de ejecución tras el informe que emitieron los bomberos en abril sobre el abombamiento que apareció y amenazaba con desplomarse si no se intervenía.

El asunto quedó resuelto en verano y las religiosas del convento comunicaron al Ayuntamiento dos meses después de la orden que se hacían cargo y estaban trabajando con un arquitecto y una empresa para realizar la reparación. La administración pidió a las religiosas que la mantuvieran al tanto de los pormenores de la intervención.